¿Te apasionan las frutillas? Una de las formas más ricas de consumirlas es en mermeladas. Todo lo que atañe a conservas caseras parece una empresa delicada, pero en este caso no hay que asustarse ya que, siguiendo los pasos, sale una mermelada en su punto, rica y saludable.

Para preparar mermeladas caseras, la primera regla es bioseguridad y parece más difícil de lo que suena. Para empezar, si queremos que la conserva nos dure mucho tiempo, los frascos que utilizamos deben hervirse, no hace falta que sean nuevos. Se hierven en una olla grande con abundante agua y un repasador limpio en el fondo, para que no se golpeen, durante 20 minutos.

Luego con unas pinzas se retiran del agua y se dejan enfriar a temperatura ambiente, para que se sequen con el aire. Las tapas se remojan 3 minutos en alcohol de 70 grados (2 partes de alcohol y 1 de agua aprox.) y también se dejan secar al aire. De esta forma, tendrás envases esterilizados, para que la mermelada dure mucho más.

Otra regla es que se debe usar una suficiente cantidad de azúcar para que esta conserve la fruta. La proporción indica que para 1 kg de fruta se usa mínimo 500 g de azúcar, y para agregar otro componente conservante, el ácido, se incorpora jugo de limón (natural), 100 cc.

Con estas medidas se obtiene una mermelada que dura tres a cuatro meses.

Mermelada de frutillas

Ingredientes:

• 1 kg de frutillas, ya lavadas y sin sus hojas
• 500 g de azúcar blanco común
• 100 CC. de jugo de limón

Preparación:

Cortar las frutillas en trozos chicos, ponerles por encima el azúcar, revolver un poco y dejar macerar para que la fruta suelte su jugo, en lo posible 2 horas.

Pasado este tiempo, pasar la fruta macerada a una olla con fondo grueso y encender el fuego en mínimo. Incorporarle el jugo de limón. Se cocinará a fuego medio hasta que comience a hervir, entonces se baja el calor al mínimo ( si el mínimo de su cocina es demasiado y puede quemarse, usar el llamado fuego pelusa o corona, o un difusor de calor) y en este punto se removerá de manera frecuente para evitar que la mezcla se pegue a la olla. El tiempo de cocción es de aproximadamente 45 minutos. Se notará que la mermelada se despega de la olla y se nota más gelatinosa. Para comprobar el punto, lo más seguro es poner una cucharadita de mermelada en un platito y dejarla enfriar para probar su consistencia.

Tema importante: la mermelada se envasa en caliente. Una vez lista, disponerla en los frascos que hayamos preparado, tapar y dejar que se enfríe a temperatura ambiente. Lista para tus desayunos, postres y tortas.