En el marco de una nueva jornada del Plan Detectar Federal, esta vez en La Redonda, la ministra de Salud Sonia Martorano realizó un balance sobre las diferentes acciones que lleva adelante la provincia con el objetivo de contener el sistema sanitario para poder dar respuesta a todos los casos que llegan en medio de una segunda ola intensa a lo largo y ancho de territorio.

“Hemos triplicado la cantidad de camas en lo público y lo privado pero eso sirve para contener, para mitigar pero no es la solución. Nosotros no queremos que la gente llegue a terapia intensiva, hoy tenemos una ocupación altísima pero no alcanza hay que trabajar en bajar la tasa de los contagios por eso es importante los testeos, el aislamiento y la gran herramienta que es la vacunar” explicó Martorano.

Sobre el ritmo de la vacunación en la provincia detalló que “En el día de hoy la provincia va a llegar al número 1.000 de vacunas colocadas, y hoy estamos colocando 35.000 dosis en toda la provincia, y con las vacunas que han llegado estamos completando las segundas dosis en geriátricos y algunos grupos que fueron vacunados con Covished que es la misma que Astrazéneca. En primeras estamos colocando a personal penitenciario y grupo de comorbilidades entre 18 y 59 dependiendo de la cantidad de personas anotadas en cada lugar y la idea es el 20 de junio terminar con este grupo para comenzar con la población general por debajo de 60 años en principio sin división de profesiones”.

En relación a la finalización del DNU nacional y provincial que establece restricciones principalmente a la circulación y el horario de bares y comercios, la ministra anticipó que “No sabemos qué va  a pasar la semana que viene con las restricciones, no podemos decir que va a pasar por las clases, todo depende de los indicadores de contagios y camas disponibles pero probablemente algunas cosas sigan igual”.

Algunos especialistas aseguran que los contagios van a aumentar un poco más los meses de mayor frío y que todavía no se llegó al denominado pico pero para Martorano “El pico de contagios nunca sabemos, lo sabemos después de lo que pasó, nos preocupamos mucho por los números altos del viernes y de la región, podemos tener niveles más alto y hay procupación por el colapso, quedan pocas camas. Es un día a día, un trabajo constante y un trabajo enorme que se está haciendo en todo el sistema de salud para dar contención a esta gran demanda que produce este contagio" y agregó  “Evitemos toda socialización, hay que bajar el número de contagios y en eso es sobre lo que más queremos trabajar”.