La dirigencia de Rosario Central tiene un frente de negociación abierto y otro por abrirse en breve: el primero es con Jonathan Bottinelli, el marcador central que viene de quedar libre de Unión de Santa Fe y está cerca de llegar al Canalla; el otro, con Javier Toledo, un viejo conocido de la casa.

El atacante, figura del ascenso de Rosario Central con aquellos recordados tres goles en Jujuy, tiene 34 años pero atraviesa un muy buen presente. Y guarda con el Kily González una muy buena relación: jugaron juntos en el equipo centralista de la B Nacional y vivían juntos en el mismo barrio privado.

Según trascendió, Toledo ya habló con el DT y le dijo que le gustaría volver a jugar en Central, donde dejó muy buenos recuerdos. Pero lo económico no será sencillo y es un factor que podría jugar en contra de esos deseos.

A Toledo le queda contrato en el Decano, club que no tiene problemas en negociarlo. Eso sí: no lo va a regalar. Y Central no está en condiciones de comprarle parte del pase ni de afrontar un préstamo con un costo elevado, por lo que será importante la fuerza que haga Toledo y la flexibilidad de los tucumanos.

Avances por Bottinelli

Por otro lado, la dirigencia avanza en la gestión para contratar a Jonathan Bottinelli, que a diferencia de Toledo tiene el pase en su poder porque no renovó con Unión.

Según allegados al DT, Bottinelli (35 años) es prioridad para el Kily y quiere que sea el referente del grupo, quien maneje el vestuario y tenga la voz de mando dentro de la cancha, por lo que vendría para ser titular.

Ambas partes se están poniendo de acuerdo con los números, con buena predisposición de ambos lados. Y la condición que la dirigencia había planteado, que se vaya algún defensor de los actuales del plantel, podría cumplirse: hay charlas para rescindir el contrato de Cristian González, el uruguayo que pertenece al Sevilla y tiene contrato hasta diciembre de 2020.

Con la llegada confirmada de Emiliano Vecchio, la chance de Bottinelli y si viene Toledo, el Kily ya estará conforme para afrontar el torneo de transición. A menos que haya una venta y deba ir a buscar un sustituto.