Italia es el país más castigado por el coronavirus en Europa y el segundo en el mundo, con más de 1.800 muertos y 25 mil contagiados en todo el territorio. El primer ministro Giuseppe Conte determinó una cuarentena de la población para evitar la propagación del COVID-19. Desde hace una semana que la gente solo puede moverse por razones laborales, para ir al comprar alimentos y productos para el hogar, por temas de salud, o por emergencias. Los únicos negocios abiertos son los supermercados, bancos y farmacias.

Los expertos estiman que Italia está entre 9 y 10 días más avanzado que otros países en la propagación de la enfermedad, como Francia España, Alemania o los Estados Unidos. Por ello, se llevó adelante una iniciativa para tratar de concientizar a otras naciones para que tomen medidas más severas y no subestimen el coronavirus. 

Se les pidió a los italianos de diversas partes del país que se encuentran de cuarentena recluidos en los hogares que graben un mensaje con sus teléfonos celulares a su yo pasado. La consigna es que se dirijan a sí mismos 10 días atrás, cuando todavía no se imaginaban el avance que podía tener el COVID-19.

 

“En diez días la vida ya no será como hasta ahora", advirtió un hombre, a lo que completó una mujer: "El peor escenario posible sucederá”. Cada uno de los participantes en el video exponen que lo que en un principio parecía algo sin importancia, luego se convirtió en una epidemia que dejó al país en estado de alerta y que forzó al Gobierno a establecer una cuarentena “que solo se había visto en películas”.

“Una nación entera encerrada en su casa, ¿no lo viste venir a que no?”, remarcó otro joven. En ese tramo de la grabación, varios de ellos muestran preocupación por la poca seriedad con la que otras naciones se toman las medidas de prevención. Y finalmente piden encarecidamente que la gente se quede en sus hogares.

El sábado pasado se difundió otro video desde Italia en el que se podía ver como cientos de ciudadanos salían a los balcones para aplaudir y cantar en un intento por levantar el ánimo en plena cuarentena.