Deportes 05.02.2020
A Colón le siguen costando los segundos tiempos
La reanudación de la Superliga no es para nada fructífera para el Sabalero, que perdió dos duelos cruciales por la permanencia y hay un motivo que se prolonga en busca del por qué
Fuente: UNO SANTA FE
Quedan cinco fechas para el cierre de la Superliga, pero 11 más por la Copa de la Superliga para dirimir el destino de Colón. Hoy está en una zona incómoda, en el umbral del descenso y, por si fuera poco, no depende de sí mismo para zafar. Por eso empieza a ver de reojo a los otros rivales. Lo complicado es que el saldo es negativo contra aquellos adversarios directos, lo que agudizó todavía más la malaria.
No es sorpresa tampoco, porque la sintonía viene hace más de un año y pese al arribo de Diego Osella como DT, no hubo cambios. El equipo luce endeble y sin reservas anímicas. A la postre, tampoco hace goles y el escenario se magnifica. Está claro que acá lo que se precisa es trabajo, pero el margen es cada vez menos y eso genera preocupación. Nombres hay para levantar, pero la malaria y la baja moral también juegan su partido, que hasta el momento es desfavorable.
UNO Santa Fe José Busiemi
Es complicado encontrar por qué el Sabalero atraviesa por esto. Lo obvio sería decir que no juega bien y por eso pierde. El otro factor viene por la merma que tiene cuando va de visitante, donde perdió todos los partidos de la actual temporada y llega a 21 sin sumar de a tres fuera del Brigadier López. La última vez que se trajo algo fue ante Vélez el 15 de febrero de 2019, cuando igualó 1-1. El técnico era Julio Comesaña.
Después se volvió siempre con las manos vacías. Sin embargo, hay otro motivo que lo tiene a mal traer: la falta de reacción en los segundos tiempos. Esto se vio en la reanudación del torneo, perdiendo ante Central Córdoba y Banfield, a la postre rivales directos por la permanencia. En este juego de las estadísticas, si se contemplan los 18 juegos, Colón ganó solo dos, empató seis y perdió 10, con ocho goles a favor y 15 en contra. Sin dudas, una baja alarmante en las etapas complementarias, que son un punto de inflexión en este campaña.
"La idea es armar un equipo confiable y que no le hagan goles", dijo en reiteradas ocasiones el entrenador Diego Osella. Hasta el momento no pudo conseguirlo y se mantendrá en la medida que la receta no le funcione. El tema es saber hasta cuándo.
Siempre se dice que una formación tiene que se regular para prosperar y marchar en un camino con saldos positivos. Este Colón va fuera de esto y si no mejora, la condición en Primera División pasará de estar en jaque a mate. Todavía hay tiempo para dar vuelta la taba. ¿Podrá?