Este jueves por la mañana se llevará a cabo en el Ministerio de Trabajo de la Provincia de Santa Fe una nueva audiencia para definir el futuro del transporte urbano por colectivos de la ciudad de Santa Fe. 

En el cónclave, funcionarios municipales, empresarios y dirigentes de UTA, buscan una salida a la crisis económica del sector producto de la reducción de subsidios nacionales.

Es que la semana pasada se conoció que el acuerdo de Nación con las provincias perjudica directamente a la ciudad de Santa Fe, que verá reducidos los subsidios que recibe en un 50%: de 24 millones de pesos mensuales pasaría a ser de 12.

Ante esta situación, se plantea una verdadera encrucijada para los empresarios del sector: pueden adherir al convenio de Nación, cuya condición para recibir el 50% del subsidio actual es congelar la tarifa por 180 días, o no sumarse al convenio y perder la totalidad de los aportes del gobierno nacional.

Es por eso que los representantes del servicio de colectivos barajan métodos "paliativos" para subsistir durante los cuatro meses de congelamiento de tarifas que exige el convenio de Nación.

Reducir frecuencias y personal podrían ser algunas de las alternativas para evitar un retoque en la tarifa, la cual, según aclaró el intendente Emilio Jatón, es más baja que la de otras jurisdicciones.