Lo dicen los economistas: en los países con alta inflación, cualquier movimiento en el tipo de cambio se traslada más rápido a los precios. Y en la Argentina, ese fenómeno parecer ser inevitable. El dólar sumó casi $10 solo durante el mes pasado: cuando tuvo una escalada de $28,25 a $37,99. Y aunque ese salto ya se reflejó en los precios de los productos, los especialistas aseguran que se intensificará durante septiembre.

¿Cuáles fueron los productos que más aumentaron en las últimas semanas? Papel higiénico (6,2%), rollos de cocina (6,3%) y repuestos para afeitar (6,2%). Y entre los alimentos, té (5,8%), café (5%), aguas envasadas (5,5%), yerbas (5,3%), mayonesas (5,4%), puré de tomate (5,1%) y pastas secas (4,5%), según un relevamiento realizado durante agosto por la consultora Focus Market a través de Scanntech (los lectores de códigos de barras) en más de 500 comercios de todo el país. Para determinar el aumento se tomaron cinco productos de cada categoría y se sacó un promedio.

En lo que va del año, la delantera en aumentos la llevan tres productos: harinas, con una suba promedio de casi 100%, pastas secas y aceites, todos alimentos de la canasta más básica de los consumidores.

"Los argentinos están comenzando a tener un problema importante. Los salarios son constantes y los precios cada vez tiene una variación alza cada vez mayor. La devaluación del último mes de agosto pegó fuertemente sobre alimentos, bebidas, artículos de limpieza y estética personal generando una importante caída del consumo interanual en esas categorías", destacó Damián Di Pace, director de la consultora.

 Las subas de precios provocan cambios de estrategias en los consumidores, que comienzan a reemplazar productos por marcas más baratas o directamente dejan de comprarlos

Desde las cadenas de supermercados, aseguran que las nuevas listas de precios ya están llegando con fuertes aumentos, pero que no todas las empresas los convalidan ya que esperan los resultados de algunas reuniones entre las empresas de consumo masivo y el Gobierno que ya se pusieron en marcha y donde se podría acordar un traspaso más lento de los precios a la devaluación.

Las subas de precios provocan cambios de estrategias en los consumidores, que comienzan a reemplazar los productos que compraban habitualmente por marcas más baratas o directamente dejan de comprarlos.

En el caso de las bebidas sin alcohol, por ejemplo, los jugos concentrados son los que presentan mayor evolución de precios en agosto en comparación con el mismo mes del año pasado (37,15%) y son también los de mayor caída en ventas en cantidad (-22,15%). También cae la venta de gaseosas: -12,81% en volumen interanual, con un aumento de precio de 25,27%.

 En el caso de los alimentos secos envasados, la suba en las pastas provocó un aumento en las ventas de otras categorías como arroz o polenta

En el caso de los alimentos secos envasados, la suba en las pastas provocó un aumento en las ventas de otras categorías como arroz o polenta. "El arroz crece en su consumo interanual (1,77%) posicionándose por encima de pastas secas y pastas frescas que caen en su consumo interanual 2,87% y 4,4% respectivamente. Por su parte, la polenta crece en su consumo 20,34% con mucho menor impacto en la evolución del precio interanual", destacó un relevamiento de la consultora.

"El momento del consumo masivo en la Argentina es quizás de los más complejos de su historia y los hogares quieren hacer rendir al máximo su gasto en la canasta básica", explicó Federico Filipponi, director Comercial de la consultora Kantar Worldpanel, especializada en consumo. Según detalló, los precios crecieron 109% en los últimos tres años mientras que el gasto medio de un hogar se incrementó solo en 92%. "Esto quiere decir que los hogares usaron estrategias como cambiar el lugar de compra, de marca o buscar promociones para ahorrar esos 17 puntos de diferencia", agregó.

Las perspectivas no son muy optimistas: el segundo semestre de 2018 apunta a ser el más negativo de los últimos años. "Proyectamos una caída de 5% para el segundo semestre, cuando hace un mes esperábamos que fuera de 3%, entones, el año cerrará así 2% abajo de 2017", analizó Filipponi.