El martes 28 de agosto a las 22 hs. llega a la TV Pública el anteúltimo capítulo de El Marginal 2. Borges (Claudio Rissi) aparece en el pabellón del Sapo (Roly Serrano) porque supuestamente Morcilla (Carlos Portaluppi) lo invitó a pactar una tregua. Pero lejos de eso, lo echa y castiga a Morcilla dándole tareas humillantes para castigarlo. Luego, prepara una reunión con los referentes de todos los pabellones y los incentiva a hacer un motín como para deshacerse definitivamente de Borges.

 

Borges increpa a James (Daniel Pacheco Bautista) por haber apuñalado a Diosito (Nicolás Furtado). Pero él y Barny (Marcelo Peralta) le explican que Diosito tuvo la culpa, por no saber comportarse en la cárcel. Gladys (Ana Garibaldi), la esposa de Borges, le lleva una carta falsa a Diosito en la que Mecha (La Joaqui) supuestamente se despide de él. Diosito rompe en llanto y con esto su hermano confirma que no está hecho para sobrevivir en San Onofre y tienen una emotiva reconciliación.

 

Emma (Martina Gusmán) denuncia a Rita (Verónica Llinás) con Garófalo (Daniel Fanego). Le presenta las pruebas del negocio que obliga a familiares de los presos a prostituirse.

 

Además, el Sapo le dice a Patricio (Esteban Lamothe) que le va a regalar la libertad y le pide a sus matones que lo lleven a la terraza y lo hagan bajar por la pared con equipo de montañista. En secreto, les da la orden de soltar los ganchos para matarlo. Patricio sólo piensa en fugarse, mientras tanto se entrevista con Emma y ella le muestra que Camila (Paula Cancio) está presa en un lugar muy tranquilo, donde va a poder criar a su hijo.

 

Borges paga un asado para los presos del patio que lo defendieron contra los matones del Sapo y brinda por su destitución. Ese día, Oaki (Rodrigo Noya) bautiza a su banda de presos jóvenes como la Sub-21.

 

El Sapo le exige a Garófalo que traslade a la banda de Borges a otro penal; pero como se niega lo toma de rehén y les ordena a los referentes de los pabellones que inicien el motín.