El argentino, que figura quinto en la elección entre los perimetrales de la Conferencia Oeste según la última publicación que hizo la NBA (debe llegar a la segunda colocación para ingresar directamente al All Star Game), apenas pudo jugar 4 minutos, ya que en un bloqueo chocó con su ex compañero Dewayne Dedmon y eso complicó su continuidad en el juego. Unos instantes después avisó al banco de su molestia en el muslo derecho y salió del partido. La cuenta oficial de los Spurs unos minutos después anunciaba que el bahiense no iba a regresar al partido

Los Spurs que llegaban a este duelo con un registro de 20 juegos consecutivos ganados contra los Hawks en San Antonio, actualmente es la racha activa más larga de victorias de local que un equipo de la NBA mantiene sobre otro, no pudieron mantener su dominio. Los Hawks son apenas mejores de locales, donde ganaron la temporada pasada, pero tienen una marca de 19-25 jugando en Atlanta contra los Spurs.

San Antonio intentó quedarse con el encuentro con LaMarcus Aldridge como estandarte, ya que Kawhi Leonard no estuvo en el partido. El pivote de los Spurs fue el goleador del equipo con 25 puntos y 11 rebotes. Pero no fue suficiente, porque apareció en Atlanta el base Dennis Schroder, que fue el máximo anotador del partido con 26 puntos, 6 asistencias y 5 rebotes, para dejar al equipo de Popovich sin la victoria.

Los Hawks que habían perdido cinco de los últimos seis encuentros, cuatro de ellos en su gira por la Costa Oeste, supieron quebrar lo que propuso San Antonio y en un final muy cerrado tuvieron el temple suficiente como para no fallar desde la línea de los tiros libres.