El fiscal General cuyo pliego fue aprobado este miércoles por la Asamblea Legislativa, Jorge Baclini, adelantó parte de sus expectativas por LT10. 

En ese contexto, opinó que durante el período del sistema procesal penal (comandado por Julio de Olazábal) “se sentaron las bases para ir construyendo lo que se está viniendo”, mientras que este segundo período dará “una proyección mayor”.

Asimismo, aseveró que dicho sistema debe “generar algún tipo de respuesta” ante la comisión de delitos, y hacerlo “de forma más rápida (que actualmente)”. “Este es uno de los más grandes desafíos: que el sistema muestre que responde”, reafirmó.

Delitos graves  
A la hora de establecer sus prioridades, el fiscal General designado se refirió a los delitos violentos, “que son los que más impactan fundamentalmente en Santa Fe y Rosario”. 

Baclini hizo especial hincapié en los homicidios, y agregó: “no cabe duda de que hay grupos de sicarios” y ya no solamente conflictos interpersonales que se resuelven de forma violenta, como ocurrió durante mucho tiempo. 

En estos últimos casos, “el autor es más fácilmente identificable”. En cambio, cuando hay sicarios hay economías delictivas y narcotráfico vinculados, y es “más difícil encontrar el autor porque los testigos temen ser las próximas víctimas y no hablan”. 

Pero además, el letrado sostuvo que no solamente son personas contratadas para matar, sino miembros de bandas que logran ascensos hacia el interior de las mismas mediante sus crímenes. 

Por otra parte, Baclini manifestó su preocupación por los robos calificados (entraderas y asaltos). 

Para hacer frente a todo ello, resaltó, “se necesitan más fiscales”. “Tenemos que distribuir el flujo de trabajo conforme a los niveles de respuesta que queremos dar”, indicó.