Esta mañana se realizó en tribunales la audiencia de apelación por el juicio a Los Cronos, un clan delictivo de la Villa del Centenario, cuyos miembros fueron condenados a la pena de 14 años de prisión más declaración de reincidencia para dos de los cuatro imputados.

El tribunal de alzada integrado por los jueces Martha Feijoó, Jaquelina Balangione y Roberto Reyes, este último como presidente, escuchó los agravios planteados por los abogados defensores que, disconformes con la sentencia, apelaron el fallo.

El 15 de junio último, el tribunal pluripersonal compuesto por los jueces Sergio Carraro, Alejandro Tizón y Néstor Troncoso, condenó a la pena de 14 años de prisión efectiva a Luis Exequiel Lugo, alias “Cusi”; Juan Alberto Benítez, alias “Bebi”; Juan Pablo Rodríguez, alias “Cabe”; y Roberto Andrés Osuna, alias “Rober”; además de la declaración de reincidencia para
los dos últimos.

En el juicio

El hecho investigado fue el crimen de Ernesto Fabián Barco, miembro de un grupo antagónico (“la banda del campito”), ocurrido la madrugada del 25 de octubre de 2014, en un pasillo ubicado a la altura de calle Colón al 3000, conocido como “del Gauchito Gil” de la villa del Centenario.

Durante el alegato de clausura, los fiscales de Homicidios, Cristina Ferraro y Jorge Nessier, habían solicitado la pena de prisión perpetua para los cuatro, como coautores por el delito de homicidio doblemente agravado por el uso de arma de fuego y por el concurso premeditado de dos o más personas.

Por su parte, el abogado particular Héctor Tallarico -por Rodríguez y Lugo- y el representante del Servicio Público Provincial de la Defensa Penal, Matías Spadaro -por Benítez y Osuna-, sostuvieron la inocencia de los imputados, para los que solicitaron la libertad.

Finalmente, el tribunal condenó a 14 años por homicidio calificado por uso de arma y consideró a cada uno de los acusados como coautores. La sentencia fue inmediatamente apelada por las respectivas defensa, que hoy renovaron los planteos.

Contra la testigo

En primer término, el Dr. Tallarico solicitó “que la resolución sea revocada” y pidió “paciencia” a los miembros del tribunal para desandar un relato histórico que tuvo su eje en la crítica de una testigo clave, que fue la que aportó los datos de los asesinos a la policía.

Una vez más la defensa intentó provocar el descrédito de Jaquelina Suárez, una mujer de 23 años, madre de tres hijos, que debió abandonar el barrio tras esa intervención.

Por su parte, el Dr. Spadaro fue mucho más extenso en su exposición -habló 50 minutos-, esto porque “los desaciertos del tribunal (que dictó la sentencia) fueron múltiples” y por eso “los agravios son muchos”, dijo.

En distintos pasajes de su argumentación, solicitó que se anule, invalide o revoque la sentencia según el tribunal de segunda instancia considere que corresponda. Y propuso como alternativa un cambio en la calificación penal para sus dos defendidos, para que sean condenados por homicidio en agresión y se le impongan penas de 3 años a Benítez y 4, a Osuna.

La fiscalía

En último término, fueron los fiscales Ferraro y Nessier quienes respaldaron una vez más a la testigo Suárez por sobre la cantidad de personas citadas para el juicio, y valoraron la “calidad” de su relato.

Fue el fiscal Jorge Nessier el encargado de explicar por qué llegaron al punto de tener un “único y solitario testimonio” y cuál es el valor que representa en sí mismo. “La testigo reseñó solamente y nada más que lo que vio. No es un testimonio inventado que sobreabunda en detalles”, dijo. En cambio “un discurso falaz hubiera dado otro tipo de detalles” que Suárez no pudo completar.

La mujer relató que volvía de comprar cigarrillos cuando vio a los Cronos, a los que identificó por sus apodos, y aseguró que fueron ellos los que dispararon en dirección al pasillo donde luego fue hallado el cuerpo de Barco.

La audiencia se completó con las réplicas, en las que cada parte insistió con sus respectivas tesis y el tribunal pasó a deliberar y dará a conocer qué medida adopta dentro de los plazos legales.