El barrio Nueva Esperanza Este comenzó a surgir hace unos años cuando se puso en marcha el proyecto Mi Tierra Mi Casa, luego se pusieron a disposición terrenos para el Procrear y fue así que muchas parejas jóvenes decidieron levantar sus hogares. El área de proyecto a licitar se encuentra delimitado por Callejón Funes al norte, vías del ferrocarril Belgrano al este, Callejón Aguirre al sur y Alvear al oeste. Desde entonces el sector comenzó a crecer y en las distintas reuniones entre los vecinos surgió el tema de la inseguridad. Hoy hay un avance concreto y tiene que ver con la instalación de alarmas comunitarias para prevenir los hechos delictivos.

En la ciudad de Santa Fe no sería el primer barrio en instalar estos dispositivos. Hoy vecinos de Siete Jefes, Barranquitas, Ciudadela, Schneider, Sur, Los Troncos, Los Ángeles y Colastiné, solo para nombrar algunos, viven en el área de cobertura de las alarmas comunitarias que el municipio junto con ellos instalaron desde 2012. Son aproximadamente unos 70 los aparatos colocados en diferentes puntos, en todos los casos mediante el mecanismo de esfuerzo compartido: los vecinos adquieren el equipamiento, y la Municipalidad concreta la instalación y realiza la operación a través del Centro de Monitoreo, en coordinación con el 911. Para alcanzar este propósito ya hubo un encuentro entre personal técnico y responsables del Centro de Monitoreo y los vecinos de Nueva Esperanza Este interesados la instalación del sistema. La reunión se llevó a cabo en la sede de la vecinal La Esmeralda. En la ocasión participaron unos 30 vecinos, además de la coordinadora de la zona Noreste, Florencia Blanche.

Valer recordar que en varias ocasiones y mientras los propietarios levantaban sus casas en el marco de los distintos programas sucedieron hechos de robos de materiales de la construcción. Eso provocó que en algunos casos los vecinos tuvieran que organizarse y cuidar el lugar entre todos. Ahora con estos aparatos y a partir de los resultados positivos, podrán estar más seguros y tener una herramienta para persuadir el delito. Ellos son conscientes de que la inseguridad es un trabajo de todos.

A un paso de concretarse

El Concejo Municipal de Santa Fe tomó la iniciativa de los vecinos e intenta ser desde entonces el nexo con quien corresponde para poder alcanzar al objetivo. El edil Leandro González viene trabajando con los vecinos desde la conformación del barrio y ahora también los acompaña en la idea de integrar el sistema de alarmas. "Es un barrio muy movilizado, de gente joven, comprometida con el lugar que eligieron para vivir. Trabajamos en varios proyectos como el de la designación de las calles que aún espera ser tratado en el Concejo; y hace un tiempo nos plantearon algunas cuestiones relacionadas con la inseguridad, con la intención de tener un mejor contexto donde vivir y desarrollarse pensaron en esta iniciativa", contó el concejal del FPCyS.

El edil permitió para que se concretara la primera reunión que se realizó hace dos semanas. "En ese encuentro conocieron todos los detalles y estuvieron de acuerdo en poder llevarlo adelante. Ahora están en la instancia de que los técnicos van a relevar el barrio para ver cómo se puede organizar el sistema", manifestó más adelante González quien agregó que "los vecinos están entusiasmados y ahora solo están evaluando los costos para así decidir si siguen adelante".
Si bien el sistema en este caso funciona en forma conjunta, desde el momento en que los vecinos toman la decisión de llevar a cabo la instalación y adquieren el equipamiento, la instalación y que esté operativo puede demandar unos 20 a 30 días. "Esto surgió a partir de los distintos proyectos que tenemos para el barrio, la inseguridad fue un tema más sobre todo a partir de algunos hechos que sucedieron. Las alarmas comunitarias surgieron como una posibilidad, los charlamos con autoridades del municipio y cuando nos confirmaron que era factible volvimos a juntarnos con ellos para seguir avanzando", agregó Leandro González.

Cómo funciona

La alarma comunitaria es un artefacto receptor que se instala en la columna del alumbrado público y al que se asocian los dispositivos de alerta que tienen un tamaño similar al de una alarma de un auto. Ese botón tiene un alcance de 100 a 120 metros hasta el receptor, que a su vez tiene un chip de datos que se conecta con el Centro de Monitoreo. Es decir que si se coloca en una esquina, alcanza a cubrir las cuatro cuadras en cruz.

Cada dispositivo tiene tres botones: uno que acciona una luz potente; otro dispara un sonido corto; y el tercero, activa los dos anteriores y además se conecta con el Centro de Monitoreo. Vale aclarar que una vez que los vecinos se organizan, el municipio solicita que adquieran el equipamiento, y luego se hace cargo de la operación del sistema.