El jefe comunal dijo que "en menos de 15 días nos visitaron el ministro de Infraestructura, José Garibay, el senador Lisandro Enrico y el técnico de hidráulica Daniel Alonso. Estamos muy contentos con que nos escuchen, pero pese a lo importante de estas visitas lo cierto es que no hemos logrado avanzar un centímetro en nuestros reclamos. Y el agua sigue ahí, a metros del casino y llega a la ruta 90".

 

Según Rébora, "no se giraron recursos, no se facilitaron maquinarias, no se comenzaron obras, ni siquiera se movilizaron expedientes. Hace cuatro años que venimos alertando a la provincia de nuestra situación, y si bien ha cambiado el titular del Ejecutivo (lo notamos y lo celebramos) el color político sigue siendo el mismo, por lo que uno esperaría un poco menos de burocracia y más resultados, más aún ante lo extremo de la situación".

 

"Transcurrida una hora de terminada la asamblea en la que también participó el senador Enrico, donde el pueblo le transmitió, cara a cara, la gravedad de nuestra preocupación con el tema hídrico; se comunicó conmigo el técnico Daniel Alonso (responsable de Hidráulica en la región), y me dijo «que venía a Melincué a informarnos y mostrarnos el proyecto del terraplenado»", relató Rébora.

 

"Creímos que Alonso venía a anunciar el comienzo de obra, por ello desde la comuna llamamos a todas las instituciones del pueblo y nos reunimos aquí, en la sala de reuniones. Yo ya no me quiero hacerme más cargo de los incumplimientos de la provincia. Son cuatro años de reclamar y no obtener respuesta, por ello quería que todos escucharan a Alonso. Pero en esa reunión, lejos de anunciar la obra que necesitamos con urgencia para zafar de esta situación crítica que vivimos —no la obra de fondo, que es la ampliación de la estación de bombeo— nos dijo «que la comuna de Melincué tenía que pedir el presupuesto de las obras»".

 

Según el relato de presentes en la reunión "se vivieron momentos muy tensos, porque esta gente —por los responsables de la provincia— se ve que no saben lo que es vivir con el miedo de que el agua se lleve tus cosas, tus sueños, tu futuro". Sobre aquella reunión con Alonso, responsable de Hidráulica de la región General López, Rébora explicó que "una vez que reunimos los presupuestos a nombre de la comuna, como nos solicitaron en esa reunión, ahora nos informaron que tenemos que decirle a las empresas que nos vuelvan a enviar los presupuestos, pero a nombre del Ministerio de Infraestructura y Transporte de la provincia".

 

Sobre la asamblea en la sala de la Cultura de Melincué de la que participó Enrico, subrayó la cantidad de vecinos asistentes, y la homogeneidad del reclamo, incluso entre dirigentes y militantes que forman parte del sector político de Enrico y que hoy acompañan el reclamo y la insatisfacción de la comuna y del pueblo.

 

"Al senador Enrico el pueblo le entregó un petitorio donde se le plantea que Melincué quiere una reunión con el gobernador, Miguel Lifschitz. Melincué no quiere más intermediarios. Ya estamos cansados de intermediarios. Han pasado muchos años y no han hecho nada de todo lo que les hemos reclamado. Queremos planteárselo en persona al gobernador. Melincué está en pie de guerra, y como ya sucedió una vez cuando se quisieron llevar los tribunales de Melincué, vamos a tomar dos o tres colectivos, los vamos a llenar de vecinos, y nos vamos a instalar en frente de la Casa de Gobierno en Santa Fe", concluyó Rébora.

 

Obra. La obra requerida con inmediatez consiste en un terraplenado de 7.000 metros cúbicos de tierra, detrás del edificio del hotel-casino (sobre calle O'Higgins, que es paralela a la ruta 90), y otro que corre paralelo a la ruta 90, frente a la laguna.

 

La obra demanda una inversión de 1.100.000 de pesos. La provincia se ocuparía de levantar 50 centímetros el nivel del suelo, costeando la ruta 90 y del lado de la banquina que está pegado a la laguna. Esto tiene que ver con la seguridad de Melincué (para que el agua no ingrese al casco urbano) y además con la preservación del patrimonio del estado provincial, porque las olas, por estos días, están royendo el terreno y está llegando a la calzada.

 

"Va a comenzar a deteriorar la calzada de la ruta 90 y reconstruirla y repavimentarla será una obra millonaria. Lo que hemos hablado desde hace mucho tiempo es que ellos (la provincia) traigan trozos de pavimento (resabios de la vieja ruta removida cuando construyeron la nueva) que cumplen la función de piedras, y que están en Santa Teresa. Todos los bloques de hormigón que han sacado los van a trasladar a Melincué, y van a hacer un terraplenado de piedra. No es un terraplenado de tierra como ya existió en nuestro pueblo, sino que van a colocarlas para que la rompiente de contra estas piedras", detalló Rébora.

 

Y acotó que "sobre la banquina van a hacer un pequeño muro de empedrado de 50 centímetros más alto que la ruta por las dudas. La ruta está en la cota 86. La quieren elevar un poquito más. El peor momento de Melincué estuvo en 86,80. La obra demanda una inversión que resulta mínima a la luz de los problemas y las pérdidas que genera este estado de situación, y ni hablar si la laguna sigue subiendo y entra al pueblo: es de 1.100.000 pesos".