Diego Osella quiere intensidad. Newell’s necesita tener esa cualidad, pero a la vez cuenta con escaso margen para cometer errores que lo dejen sin el objetivo de los tres puntos que irá a buscar esta noche en Lanús. Así está planteado el panorama. Por un lado un cambio de estilo de juego, más vertiginoso, de entrega y sacrificio. Y por otro la obligación de vencer, porque otro resultado lo dejaría aún más relegado de lo que está actualmente. Lejos de las pretensiones de protagonismo buscado y transitando un torneo de participación y nada más.
  El entrenador debutó —desde fuera de la cancha por estar suspendido— hace una semana con una igualdad frente a Unión y no tocó demasiados nombres. Después del análisis de lo que dejó ese partido y ante un rival que anda derecho como el Granate, el DT retocó algunas piezas para organizar el mediocampo y cerrar espacios para evitar ser golpeado. Y para lograr esta meta todo indica que tocará un nombre de peso de la ofensiva, en este caso Ignacio Scocco, para poblar la zona de volantes y plantear el juego en ese sector de la cancha. Si finalmente sale Nacho, el candidato a ingresar sería Mancini con el fin de transitar un carril y dar una mano en la contención tanto a Mateo como a Denis Rodríguez (ingresaría por Escobar, ver aparte).
  Después de repasar el video del cotejo con los tatengues, Osella fue sacando conclusiones sobre las virtudes que mostró el equipo en el Coloso, pero a la vez las fallas que tuvo y que derivaron en que el rival se llevara una igualdad a pesar de haber atacado mucho menos que el rojinegro. Hoy el rival es otro y no sólo lidera la zona 2, sino que lleva cinco encuentros sin perder y es el único invicto de este grupo que integra la Lepra.
  Todo el cuerpo técnico tiene en claro que necesita un golpe anímico para aumentar la confianza. Los resultados están por encima de todo y disimulan los errores, esos que pueden corregirse con trabajo y con la tranquilidad que entregan las victorias. No es nada raro y es lo que siempre sucede en el fútbol, por eso la prioridad de los que hoy le tocan conducir tras la salida de Bernardi está focalizada en ese aspecto. Por supuesto que mientras tanto buscan la mejoría desde lo físico para lograr imponer la idea de juego.
  Newell’s está muy abajo y debe pegar el salto. Para eso sólo se puede sumando de a tres como primera medida mientras continúa la búsqueda del juego pretendido. “Llevamos ocho días de entrenamientos y vamos tratando de instalar nuestra idea”, dijo el técnico el miércoles al mediodía en la conferencia de prensa. Pocas jornadas en números como para ensayar todo lo pregonado, aunque cuenta con un plantel experimentado que ha transitado por diversas ideas tácticas y que puede adquirir rápidamente el mensaje.
  En el sur bonaerense se presentará el rojinegro en esta búsqueda de marcadores que limpien el camino en el torneo. No se habla de identidad en este caso, porque en el último tiempo fue mutando de un extremo a otro precisamente por las magras campañas que impidieron transitar por la huella que dejó Martino. Pero Martino hay uno solo y las imitaciones son sólo eso, copias.
Por eso cada entrenador tiene que imponer lo que mejor cree conveniente para una formación y de acuerdo al plantel con el que cuenta. Hoy, por el momento, Ñuls quiere ser intenso y sumar.