El Ejecutivo provincial avanza con la refacción y ampliación de una decena de comisarías y cuatro unidades penitenciarias en el Gran Rosario en los próximos 60 días. Para estas obras está prevista una inversión final de 490 millones de pesos y se enmarcan dentro de un plan de trabajo en toda la provincia en materia de infraestructura que el gobernador Miguel Lifschitz trazó para sus primeros cien días de gobierno, y que está presentando por áreas, en este caso de seguridad, y la semana pasada presentó en educación por 538 millones de pesos.

Después seguirán otras comisarías y unidades penitenciarias.

Desde el Ministerio de Obras Públicas provincial, a cargo de Julio Schneider, señalaron que las obras consisten en refacciones y ampliaciones, que apuntan fundamentalmente a mejorar las condiciones laborales de los trabajadores de la institución policial, con nuevos equipos de sanitarios, cocinas, y en todas las comisarías se habilite como mínimo una sala de recepción de ciudadanos para hacer trámites y denuncias.

Los trabajos en las comisarías para los próximos dos meses demandarán en total una inversión de 10 millones de pesos. El plan prevén la refacción de las comisarías 1ª y 11ª de Rosario, sub 16ª de Ibarlucea, 25ª y 29ª de Villa Gobernador Gálvez; 28ª de Acebal, 31ª de Zavalla, sub 8ª de Alvear, 23ª de Funes. Desde Obras Públicas manifestaron que estimaron que estarán listos los arreglos entre febrero y marzo.

Schneider explicó que todos trabajos no significan el cese del funcionamiento de estos edificios, sino que se fueron o están siendo desarrollados por etapas, "de manera planificada, de modo tal que no afecten el pleno funcionamiento de las tareas de los efectivos".

El titular de la cartera de Seguridad, Maximiliano Pullaro, manifestó que apunta "cumplir con los compromisos que vino asumiendo el gobierno provincial, de reducir la presencia de presos en las comisarías, objetivo que estamos cumpliendo progresivamente". Y agregó que "para eso se está llevando adelante la construcción de nuevos penales, y la ampliación de los existentes, y también estamos llevando adelante la refacción y refuncionalización de las comisarías, ofreciendo mejores condiciones laborales a los trabajadores y funcionarios policiales".

Alcaidías. En materia de unidades penitenciarias de la región, el gobierno anunció que el 1º de febrero arrancan las obras de la nueva alcaidía de Rosario, localizada en 27 de Febrero y las vías del Nuevo Central Argentino (NCA). Se trata de una licitación de 140 millones de pesos. Schneider agregó que durante el primer semestre también "vamos a licitar una cárcel de mujeres que será en el mismo predio".

Para fines de marzo se estarían concluyendo los trabajos del ingreso, el área social, las dependencias de apoyo y el edificio de gobierno de la Unidad Penitenciaria Nº16, ubicada en Camino límite y avenida de Las Palmeras. La inversión total es de 150 millones de pesos, incluyendo los cuatro pabellones que ya fueron inaugurados.

En tanto, respecto a la vieja alcaidía de Jefatura Policial (Francia 5250), hoy la nueva unidad penitenciaria Nº6, se refaccionó y mejoró todo el sistema de seguridad, con la construcción de dos cercos perimetrales, se modificó el área de gobierno, de recepción y requisa, las oficinas para el personal, las residencias para el personal, las áreas de salud y se desarrolló un lugar adecuado para la recepción de familias. Todo estos trabajos se suman al nuevo pabellón que se terminó durante el 2015, con el que se incorporaron 100 nuevas plazas para reclusos. La obra se encuentra en etapa de finalización y demandó una inversión aproximada de 50 millones de pesos.

En el caso de Piñero se avanza con la construcción de dos nuevos mini penales dentro del complejo. En junio se finaliza el modulo E y en octubre el modulo F. Ambos con capacidad para 168 internos cada uno. La inversión total prevista es de 140 millones de pesos.

Trabajos en todos los frentes

“Se viene un tiempo de muchas obras de infraestructura” volvió a repetir el gobernador Miguel Lifschitz sobre lo que proyecta para su gestión de gobierno. El mandatario tiene como obsesión el desarrollo de la infraestructura vial, educativa y de seguridad. En este sentido, el gobernador apuesta a que la fórmula resultante de pago en concepto de coparticipación que la Corte Suprema obligó a devolver a Santa Fe sirva para motorizar obras.