"Evaluamos la situación y dimos las directivas para resolver los inconvenientes en forma urgente", dijo el gobernador Miguel Lifschitz tras una recorrida por las localidades de María Susana y Piamonte, cuyos pobladores se vieron afectados por el ingreso de agua a sus viviendas luego del aluvión que generaron las intensas precipitaciones ocurridas durante el último fin de semana en la región. El mandatario tomó contacto con productores y vecinos, a quienes les adelantó que su problemática ocupará un lugar prioritario en la agenda de obras de la provincia, al tiempo que anunció un aumento significativo en materia de obras hidráulicas para todo el territorio santafesino.

La visita de Lifschitz al centro oeste de la provincia se dio en la misma jornada en que el municipio de Rosario junto con Prefectura realizó un operativo de asistencia a los habitantes de la isla El Espinillo, frente a las costas rosarinas, adonde se llevaron distintos insumos a los isleños, quienes se encuentran literalmente invadidos por el agua (ver página 4).

Luego de sobrevolar en helicóptero las zonas afectadas, el gobernador mantuvo una reunión en María Susana con el jefe comunal, Norberto Antici, y un nutrido grupo de vecinos y productores para intercambiar inquietudes, aportar ideas y contribuir a la planificación expeditiva del histórico problema de la localidad.

"Dimos instrucciones para agilizar el ritmo de los trabajos para la concreción de dos grandes obras de desagüe", dijo el Lifschitz en referencia a los trabajos de construcción del canal Biolatto (una obra ya iniciada), la excavación de un nuevo canal que lleve el agua desde María Susana hasta El Trébol y otras ejecuciones complementarias para evacuar el agua de la planta urbana.

"Estas obras resolverían buena parte del problema. Por esa razón nos comprometimos a llevar adelante esos trabajos, después de que salvemos algunas dificultades técnicas y se gestione el permiso de algunos propietarios que se verían afectados por la traza del canal", explicó el gobernador y añadió que "la idea es ocuparse activamente para resolver el problema en forma urgente".

La finalización del canal Biolatto demandará a la provincia un monto estimado de entre 15 y 20 millones de pesos y la construcción del canal María Susana aún está en proceso de análisis de costos. "En la medida en que el estado del terreno y las condiciones climáticas se reiniciarán los trabajos en el canal Biolatto, que aliviará la situación de Piamonte y María Susana y en las próximas semanas comenzará la construcción del nuevo canal para escurrir el excedente hídrico", dijo Lifschitz.

En Piamonte. La comitiva también visitó Piamonte, donde el impacto fue menor, -solo hubo algunas casas con agua en su interior. El gobernador supervisó el funcionamiento de tres bombas de gran caudal que evacúan un millón de litros por hora y ayudaron a evitar mayores inconvenientes para los vecinos de la localidad. "Allí observamos que también debemos intervenir con algunas obras menores como la ejecución de alcantarillas, profundización de desagües y obras complementarias, pero de menor envergadura que las que se necesitan en María Susana", explicó.

Minutos después de las 15.30, cuando el helicóptero que trasladó al gobernador desde la capital provincial tocó suelo susanense, un cerrado aplauso de más de un centenar de vecinos recibió al gobernador y a su comitiva integrada por el ministro de Gobierno y Reforma del Estado, Pablo Farías, el secretario de Protección Civil de la provincia, Marcos Escajadillo y el subsecretario de Coordinación del Ministerio de Gobierno, Luciano Caturelli. “A pesar de los momentos que estamos pasando nos emocionamos y nos sentimos muy agradecidos porque es la primera vez que un gobernante viene a dar la cara ante un problema histórico, que incluso en algún momento generó tensiones con los pueblos vecinos”, ilustró un campesino en el lugar.

Dos situaciones. “Noté dos tipos de situaciones, la gente más humilde que tuvo deterioros en las casas y sufrió pérdidas y también el problema de los productores que tienen sus sembrados bajo el agua”, sostuvo el gobernador. Lifscitz también analizó la situación en otros puntos de la provincia. “En general hay dos situaciones, las que tienen que ver con la ribera del río y la crecida del Paraná. Allí la situación está estacionaria y durante la jornada de hoy (por ayer) no hubo agravamientos y se mantuvo la misma cantidad de evacuados. La situación está contenido y la asistencia de los servicios de protección civil funcionan correctamente”, precisó.

“Después tenemos estos casos puntuales en algunos pueblos anegados por las excesivas lluvias como Casilda, Bouquet, Casas, El Trébol, donde la situación mejoró notablemente en las últimas horas”, agregó. El gobernador también refirió al conflicto que se da entre los productores que pretenden sacar lo más rápido posible el agua de sus campos y las localidades que terminan recibiendo el agua mucho más rápido de lo que debiera. “Para eso funcionan los comité de cuencas en los que participan productores, autoridades comunales y provinciales. No todas entidades funcionan de la misma manera de modo que teníamos programado, más allá de esta situación puntual, un trabajo mucho más fuerte en el análisis y control de canales irregulares que construyen los propietarios por su cuenta”.

“Además del trabajo más fuerte que pensamos implementar respecto a esos temas hay previsión de elevar notablemente el nivel de inversión para la ejecución de obras hidráulicas en toda la provincia”, adelantó. Para Caturelli, las obras anunciadas por el gobernador “deben ser valoradas porque, más allá de que morigeran el problema de anegamiento, son el emblema de un reclamo que tanto María Susana como Piamonte piden desde hace más de 30 años”.