La ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, anunciará este lunes el arribo de Gendarmes a la ciudad de Rosario. Junto con el gobernador Maximiliano Pullaro, la funcionaria nacional oficializará un desembarco práctico y efectivo y que tendrá como eje, además de potenciar la inteligencia criminal, la saturación y control permanente en las calles.

El despliegue de la fuerza federal tendrá foco principalmente en barrios donde se registran altos índices de violencia y donde las bandas narco que están en las carceles tienen influencia directa con base en la violencia extrema.

El arribo de la Gendarmería no es la primera vez que se hace, sino que desde 2014 el gobierno nacional dispuso, año tras año, la llegada de agentes de la fuerza para frenar la escalada del narcotráfico y el crimen organizado. La primera vez que desembarcaron las fuerzas federales fue en abril de 2014, pero los resultados, según las estadísticas, no tuvieron el mejor resultado. Solamente en 2017 se registró una leve baja de 18 homicidios en Rosario.

La llegada de Bullrich se da en un contexto en el cual recientemente el gobierno de Santa Fe anuló por decreto las custodias fijas que brinda la policía a más de 400 personas, algunos de ellos testigos que pertenecen a organizaciones criminales, y también suspendió las vacaciones por 90 días para los 24.000 efectivos de la fuerza.