La derrota en el clásico dejó en la cuerda floja al ciclo de Gabriel Heinze, de eso no hay dudas. Pero esto es fútbol, las cosas pueden cambiar su tendencia y hoy Newell’s sumó dos victorias de visitante que lo reposicionaron en inmejorable situación para el sprint de la Copa de la Liga, que incluye la clasificación a la Copa Sudamericana. Es más, una cosa seguramente llevará a la otra si el equipo del Gringo se mantiene entre los cuatro primeros que definirán el título. Y en el trayecto de las cinco fechas que faltan, el fixture tiene un alto grado de accesibilidad, aunque no hay rivales fáciles.

Este jueves pueden empezar a definirse muchas cosas. Porque si le gana a Godoy Cruz en el Coloso, quedará segundo, dejando atrás a un rival directo.

Precisamente, Newell’s supo cosechar en casa su mejor performance anual, pero debe corregirse inmediatamente. Es que viene de perder con Estudiantes (1-0) y antes solo empató con Unión 1-1, por lo que es menester recuperar la fortaleza. En ese sentido, de los cinco encuentros que le faltan, tres serán como local.

Después del Tomba, que será duro porque lo antecede en Copa de la Liga y está entrando a Libertadores, jugará de visitante con Platense, que tiene la misma cantidad de puntos pero peor diferencia de gol en la zona B, para enseguida recibir a Sarmiento de Junín, que pelea el descenso y debe aprovecharlo.

El cierre de la Copa de la Liga será de visitante de Boca, que a esa altura ya habrá jugado la final de la Copa Libertadores, y luego ante Defensa y Justicia, cuya prioridad es clasificar a la Copa Libertadores, pero además seguramente estará jugando las instancias decisivas de la Copa Argentina. Lo mismo ocurre con el xeneize.

El hecho de que Defensa-San Lorenzo y Estudiantes-Boca sean las semis de Copa Argentina, habilita un cupo más a Sudamericana que hoy es de Lanús. Y Newell’s tiene los mismos puntos e igual diferencia de gol, con menos goles a favor. Por eso, tiene todo al alcance de la mano. Depende de sí mismo.