Este domingo se jugará una nueva edición del Clásico santafesino y además de verse las caras Colón y Unión, el otro duelo será el que afronten Pipo Gorosito y el Kily González. Dos técnicos de generaciones distintas, pero que también cuentan con estilos diferentes en relación a la manera en la cual pretenden que jueguen sus equipos.

Partiendo de la premisa de que todos los técnicos trabajan, Néstor Gorosito pertenece a la escuela de los entrenadores jugadoristas, que descansan mucho en lo que puedan hacer los futbolistas. Intenta bajar un mensaje simple y busca que sus equipos intenten ser protagonistas en función de la tenencia del balón.

El rasgo más distintivo de este Colón, es el buen manejo de pelota que tiene en la zona media, a partir de la presencia de jugadores de buen pie, pero que no cuentan con tanta dinámica. Por ello, cuando el Sabalero se hace del balón es un equipo peligroso, pero cuando no la tiene le cuesta el retroceso.

Colón es un equipo con la pelota y otro muy distinto cuando no la tiene, teniendo en cuenta las características de sus futbolistas. Gorosito no es de aquellos entrenadores, que tienen como principal desafío presionar la salida del rival. Más bien busca jugar con la pelota y que sus equipos hagan control.

De allí los futbolistas que pone en cancha para conformar un mediocampo que asegura tenencia en detrimento de la dinámica. Así las cosas, el estilo de Pipo como DT está bien definido y se trata de un entrenador que difícilmente sorprenda con alguna variante táctica. Y es que ve el fútbol de una manera más simple, respaldándose en la impronta de sus jugadores.

José Busiemi / UNO Santa Fe

Por el contrario, el Kily González es un entrenador que apuesta por la intensidad. Sus equipos buscan jugar a partir de la dinámica y la presión. Por ello, tanto en Rosario Central como en Unión se inclinó por futbolistas jóvenes, que estén dispuestos a adaptarse a ese estilo de juego que pregona.

A diferencia de Pipo, el Kily no tiene como primer objetivo tener el balón, sino progresar en campo rival, pero de una manera más vertical y directa. Es decir, recuperar el balón más arriba y buscar el arco rival de forma más directa. De hecho, Unión no cuenta con jugadores de tenencia, sino más bien con futbolistas que están más dispuestos a tocar y correr.

Por otra parte, el Kily es un técnico más detallista, en relación a los trabajos de pelota quieta. Se pudo advertir en muchos partidos, que tiene varias jugadas ensayadas. Que después pueden salir o no, pero que se trabajan en la semana. Entendiendo que en el fútbol actual, la pelota quieta ayuda a resolver algunos partidos.

En consecuencia, el análisis que se puede hacer indica que Pipo es un DT más jugadorista y el Kily más tácticista. Quizás tenga que ver con que se trata de dos generaciones distintas, que pueden ver el fútbol de diferente manera. Lo cierto es que este domingo, ambos se verán las caras y allí se sabrá si alguno se impone sobre el otro.