Alguien imaginó un día que la milanesa se podía hacer sin pan rallado. Celíacos, alérgicos al trigo y experimentadores varios de la cocina pueden probar estas opciones con las que se rebozan milanesas y quedan riquísimas.

Antes, unos consejos.

• Lo ideal para que la carne que usemos en milanesa quede más tierna y sabrosa es que luego de ponerle sal y condimentos la pongamos en el huevo batido y llevemos la carne en el huevo tapada a la heladera entre media hora y una hora.
• Si la carne no parece blanda, podemos agregar un chorrito de vinagre al huevo o una cucharadita de mostaza para que ayude a tiernizar la carne.
• Si vamos a pasar doble capa de pan rallado, podemos hacer la primera capa sumergiendo en leche y la segunda en huevo para que sea más económico.

Los rebozados alternativos

1. Polenta. Ya sea al horno o fritas, directamente se pasan por polenta luego del huevo, una sola vez. No conviene dorarlas mucho.

2. Avena. Para usarla como rebozado, es conveniente pasar la avena arrollada común por la licuadora y darle apenas unos toques para que quede en pedacitos más chiquitos sin hacerse harina.

3. Puré de papas en copos. La alternativa sin cereal y más baja en calorías. Luego del huevo, apoya la milanesa en un plato donde hayas puesto una capa de puré de papas en copos. Presiona un poco de ambos lados y asi va a la sartén o al horno.

4. Copos de maíz molidos. Muy utilizada por los celíacos, conviene molerlos un poco previamente. poniéndolos en una bolsa cerrada que aplastamos con un palo de amasar.

5. Salvado de avena. Este ingrediente se puede agregar en pequeñas partes a cualquiera de los anteriores para sumarle fibra.