Rebecca Roberts, de 39 años, y Rhys Weaver, de 43, se convirtieron en padres de dos bebés al mismo tiempo gracias a la "superfetación", un fenómeno poco común del que sólo hay 10 casos registrados en el mundo.

Todo comenzó cuando la mujer quedó embarazada de Noah, su primer hijo. Durante las primeras semanas, las ecografías eran absolutamente normales pero, a partir de la semana doce, apareció en las imágenes su pequeña hermana gemela Rosalie.

Según los especialistas, la niña fue concebida tres semanas después que Noah. “Quedé embarazada cuando ya estaba embarazada, lo cual fue una locura porque se supone que eso no sucede”, aseguró Rebecca en diálogo con CNN.

“Debido a que la bebé era mucho más pequeña que su hermano, podía tener algún problema o no sobrevivir. Sin embargo, dijeron que ella estaba creciendo constantemente y fue un alivio", agregó.

 

Los dos bebés nacieron por cesárea en septiembre del año pasado y, afortunadamente, ambos con buena salud. De todas maneras, Rosalie y Noah debieron ser separados en dos unidades de cuidados intensivos neonatales por unos días para ser monitoreados por los doctores.

“Ella era una beba diminuta que cabía en nuestras manos y aunque Noah era pequeño, se podía ver que era un bebé mucho más grande que su hermana. Fue muy difícil. Tuve una operación importante y luego nuestros bebés también fueron llevados a dos hospitales distintos", reveló emocionada Rebecca y sumó que la niña recién pudo volver a casa para Navidad.

Finalmente, con respecto al extraño caso de superfetación, la flamante madre expresó: “Los médicos se dieron cuenta de que el bebé estaba creciendo a un ritmo constante de tres semanas menos que el primero, y fue entonces cuando me dijeron que creían que era un embarazo de superfetación. No podía creer que me hubiera pasado. Pero pasó y es encantador. Es como ganar la lotería”.

“Me puse feliz de tener un hijo, pero aún más por los gemelos. ¡El trabajo está hecho de una vez! Y luego Rebecca investigó un poco y nos dimos cuenta de lo únicos y afortunados que fuimos”, cerró Rhys, el papá de los bebés.