El tradicional espacio del macrocentro santafesino pende de un hilo, un juicio laboral y una resolución polémica obligan a sus integrantes a desalojar las instalaciones para que sean rematadas en los próximos meses.

El Club “El Clásico” funciona en la ciudad desde 1940 cuando un grupo de personas compraron una cancha de bowling y a través de un convenio lograron instalarlo en Hipólito Yrigoyen 3179. Con el tiempo la comisión directiva se fue modificando como así también los problemas.

Jose Luis Pilatti, integrante de la comisión directiva explicó al móvil de Mañana Oh! que hace unos días “Recibimos hace unos días una cédula de remate del edificio por un juicio laboral de una empleada con la que hubo desacuerdo y eso se perdió y se da el remate de las instalaciones”.

Lo que a ellos les llama la atención es que la medida que toma la justicia es totalmente desproporcionada en cuanto al valor de este tipo de juicios y el valor de la propiedad que tiene más de 1000 mts. cuadrados en pleno centro de la ciudad. “En ningún momento se trató de hacer un embargo sobre un bien mueble, televisores o heladeras sino que directamente se accionó contra el edificio”.

En los últimos años el club perdió la personería jurídica y si bien los trámites se realizaron, la pandemia complicó las resoluciones. “En el medio del trámite nos encontramos con esta situación” explicó Pilatti.

Desde El Clásico no quieren desaparecer y perder su función social,  “Hace 10 años junto con la municipalidad y la Defensoría del Pueblo desarrollamos “Bowling experiencia con ruedas, donde incorporamos 5 o 6 instituciones de chicos con capacidades diferentes y personas ad honorem les enseñaban practicar el deporte . Habíamos encontrado nuestra función en este proyecto  y para recuperarlo queríamos nuestra personería”.

Esta situación “Nos hace acordar mucho a la película “Luna de Avellaneda” tratamos de preservar y defender las instalaciones para las generaciones que vienen, más allá de la práctica de este deporte” explica el dirigente.

La movida de prensa dio resultados ya que el  intendente se comunicó con ellos y los transfirió a fiscalía de la municipalidad. También un concejal se acercó para ver cómo ayudarlos. “Nosotros no queremos negar el pago, el trabajador tiene derecho queremos algo coherente a un juicio laboral. Que nos sentemos las partes y buscarle la vuelta para pagar” finaliza Pilatti.