Tras el asesinato de Julio Cabal, el joven de 29 años que se encontraba atendiendo el local familiar y fue baleado por dos delincuentes, lo que más tarde le produjo la muerte, el titular de la Unidad Regional I de la Policía de Santa Fe, comisario Ricardo Motta, brindó uuna conferencia de prensa.

Según Motta, se percibe un aumento notorio de violencia en los hechos delictivos que ocurren en la ciudad de Santa Fe. Sobre el caso Cabal, el jefe de Policía señaló que "se trata de un hecho que se acaba de producir por lo que no podemos dar datos ni novedades de la investigación que está a cargo de la fiscalía, pero podemos asegurar que se harán los máximos esfuerzos para esclarecer este ilícito".

Además, Motta, reconoció que personal policial estaba trabajando en la barrios y zonas de la periferia ya que "era donde habitualmente se cometían los delitos" por eso no era "intenso" el patrullaje en el macrocentro. "Vamos a incrementar la acción operativa porque es un fenómeno del corrimiento del delito", consideró. 

El hecho ocurrió este martes a las 14, en un comercio de Urquiza al 22 de la ciudad capital. La víctima fue trasladada de urgencia por su padre en un vehículo del negocio hasta el hospital José María Cullen donde fue intervenido quirúrgicamente de urgencia pero antes de las 16 falleció por las graves heridas que sufrió.

Si bien el comisario destacó los operativos de seguridad que se realizan para evitar hechos delictivos, aseguró que los objetivos que eligen los malvivientes van cambiando: primero eran los taxis, luego los colectivos con robos a los choferes y pasajeros y ahora son los arrebatos.

Motta aseguró que se reforzará la seguridad en las calles y que se solicitará colaboración de fuerzas federales.