La madre de la nena de 12 años embarazada tras una violación y sometida a una cesárea en Jujuy pidió la remoción del ministro de Salud de la provincia, Gustavo Bouhid, por "violar la intimidad" de su hija al difundir en los medios detalles del estado de salud de la menor y de los procedimientos a los que fue sometida.

El comunicado sostiene que "el Ministro de Salud Dr. Bouhid, difundió ilegalmente —sin el consentimiento de la niña ni de su familia— en medios periodísticos gráficos, radiales y audiovisuales provinciales y nacionales el cuadro clínico de la paciente, el procedimiento médico que se llevaría a cabo, el horario de la intervención quirúrgica, las condiciones de su salud previas y posteriores al curso de acción terapéutico consentido".

Organizaciones de mujeres y de derechos humanos acompañaron el pedido y adelantaron que, además de la renuncia del ministro, pedirán sanciones administrativas a todos los profesionales y funcionarios a cargo de los lugares donde estuvo internada la niña por incumplir "los principios del protocolo" de Interrupción Legal del Embarazo "con respecto a la celeridad y la confidencialidad".

El jueves 17 de enero, un día antes de que la nena sea intervenida quirúrgicamente para inducir el parto de forma prematura, Bouhid anticipó a los medios que no se aplicaría el protocolo de Interrupción Legal de Embarazo (ILE) sino que la menor sería sometida a una cesárea.

"El hospital ha decidido cumplir con la medida médico-legal ordenada por la Justicia de la manera más segura para esa madre de 12 años que está en riesgo, tratando de tener la posibilidad de salvar al niño (sic)", dijo en ese momento justificando la decisión basándose en el tiempo de gestación del embarazo que, tras las dilaciones legales, ya cursaba la semana 24. 

Por esos días el gobernador jujeño Gerardo Morales contó que "una familia importante" quería adoptar a la neonata, que fue mantenida con vida con asistencia mecánica por cuatro días hasta que murió. Ante esto, el mandatario jujeño realizó una autocrítica y opinó que "se tendría que haber dado un paso hacia la legalización del aborto".

"El problema de esta situación no fue la objeción de conciencia, sino la obstaculización del protocolo, que en Jujuy existe. Un objetor no realiza la práctica, pero deriva. Acá se violaron todos los principios", insistió Díaz que anticipó que en los próximos días se conocerá la fecha de la marcha federal para exigir la renuncia del Bouhid.

PERFIL se comunicó con fuentes del gobierno de Jujuy que prefirieron no hacer comentarios sobre el pedido para remover al ministro.