El cacao es una fuente "gustosa" y hasta ahora no bien conocida de vitamina D, especialmente incluida en la manteca de cacao y los chocolates oscuros, ayuda a favorecer huesos más fuertes y a prevenir enfermedades respiratorias. Así lo reveló un estudio de la Martin Luther University Halle-Wittenberg, publicado por Food Chemistry.

Los investigadores sospechaban que el cacao podía contener una fuente de vitamina D. De hecho, los granos de cacao se secan después de la fermentación, se colocan sobre esteras y se exponen al sol durante una o dos semanas.

Los precursores de vitamina D, que presumiblemente provienen de hongos inocuos, son transformados por la luz solar en vitamina D2. Para comprobar la teoría, los científicos analizaron varios productos y polvos de cacao utilizando un estudio denominado espectrometría de masa.

De allí surgió que efectivamente son fuente de vitamina D2, pero la cantidad varía notablemente, mientras en el chocolate oscuro hay un contenido relativamente alto, se verifica muy poco en el chocolate blanco. "Esto no es sorprendente, porque el contenido de cacao en el chocolate blanco es significativamente inferior y confirma nuestra hipótesis de que el cacao es la fuente de vitamina D2", explicó Gabriele Stangl, una de las autoridades del estudio.

De todos modos la sugerencia es no consumir grandes cantidades de chocolate: "Se deberían consumir enormes cantidades de chocolate para cubrir los requerimientos de vitamina D, lo que no sería saludable por su alto contenido de azúcares y grasas", agregó Stangl. Los investigadores estudian ahora si es posible producir alimentos sin azúcares basados en cacao, como pastas por ejemplo, que puedan aumentar los niveles de vitamina D2 en las personas.