Con energías renovadas, un flamante entrenador que intentará profundizar el buen trabajo que realizó al frente de Jaguares y la exigencia de mostrar una imagen superadora a la de la temporada anterior (seis derrotas, por primera vez sin sumar puntos), comenzará este sábado un nuevo desafío para los Pumas.

En la fecha inaugural de la séptima edición del Rugby Championship se enfrentarán ante Sudáfrica en el King's Park Stadium de Durban, el mismo escenario donde alcanzaron una victoria histórica en 2015. Será desde las 12, con televisación en directo por ESPN 2 y ESPN Play.

Mario Ledesma, entrenador de Los Pumas. Foto: Luciano Thieberger.

El ciclo de Daniel Hourcade en los Pumas, que se inició en noviembre de 2013 y tenía como meta el Mundial de Japón 2019, se cerró prematuramente a mediados de junio. El cuarto puesto en Inglaterra 2015 y la transición que obligó el recambio generacional no parecieron suficientes para equilibrar una campaña con más altibajos que puntos favorables.

La estadística que abarca apenas 15 festejos en 54 test matchesresume impactos como las victorias en Mendoza ante Australia en 2014 (la primera en el Rugby Championship), ante Sudáfrica en Durban en 2015 (la primera en el historial con los Springboks), con Francia en Tucumán y con los Springboks en Salta en 2016.

También frustraciones como las 22 derrotas en los 28 encuentros posteriores a la Copa del Mundo y el estigma de no poder superar tanto a Inglaterra en cinco enfrentamientos como a los poderosos All Blacks en ocho duelos.

Más allá de los resultados y la traumática ventana de junio (la primera que se perdió 3-0 desde 2014), el plan de juego que implementó el entrenador tucumano de varias fases y más abierto, a puro vértigo en el ataque, fue perdiendo sustento en desmedro de la optimización de la pelota y contar con sólidas formaciones fijas, las bases en las que históricamente se asentó el rugby argentino.

Además, marginó a varios líderes, cambió al capitán y ante la sucesión de exigencias, los cuestionamientos tomaron vuelo propio. Ya no había sintonía, faltaban respuestas y la presión era asfixiante.

Mario Ledesma, en su presentación como head coach de los Pumas. (foto Luciano Thieberger).

Mario Ledesma, el ex hooker formado en Curupaytí y uno de los referentes del seleccionado argentino que obtuvo la medalla de bronce en el Mundial de Francia 2007, guió durante los últimos seis meses a Jaguares hacia los playoffs del Súper Rugby por primera vez en los tres años de existencia de la franquicia en la estructura profesional.

Fue un rendimiento superlativo con un récord de nueve victorias para un equipo que se fortaleció como local y evidenció progresos no sólo en el juego sino que también representó un punto de quiebre desde lo mental y en lo anímico, en una competencia muy demandante que siempre exige el máximo en lo físico.

No hubo mayores secretos. Ledesma impuso rápidamente su sello. Estableció un sistema más rígido pero a la vez efectivo con pases cortos y profundos y recuperó la defensa y la obtención como bases de plataforma para lanzar el juego, nutrió de confianza y sentido de pertenencia a un grupo de jugadores que creció en lo individual y se volvió homogéneo en lo colectivo.

Los nuevos modelos de Nike para la camiseta de los Pumas, que estrenarán ante los Springboks.

Esa evolución fue como una inyección vital para un plantel que venía golpeado pero creció en la adversidad y concitó la atención en la dirigencia de la Unión Argentina de Rugby (UAR). Tomaron nota. Era necesario un revulsivo.

"Es importante planificar, sacrificarse, laburar y hacerse cargo de las cosas. Buscamos la excelencia, no los resultados, sino el proceso que llevará a conseguirlos. Hay que apoyarse en el trabajo y definir una identidad, sin restarle espacio a lo creativo y espontáneo", graficó Ledesma como premisa al asumir como head coach de los Pumas, cargo que se extenderá hasta fines de 2021.

Gonzalo Quesada, asistente de Mario Ledesma. Foto: AFP

Sumó como asistente técnico al ex apertura Gonzalo Quesada -fueron compañeros en los Mundiales de 1999 y 2003-, quien regresó al país tras un recorrido de dos décadas en el rugby francés. Nicolás Fernández Miranda, Martín Gaitán y Pablo Bouza completan el staff.

La baja de Enrique Pieretto por una rotura de ligamentos forzó la citación del pilar de Saracens, Juan Figallo, como una excepción a la restricción reglamentaria de convocar a jugadores que se desempeñan en Europa.

"Siempre tuve el sueño de volver. Fue duro verlo desde afuera, pero vengo a sumar", comentó el salteño, quien regresa al seleccionado tras tres años y ante el rival de su última actuación (la derrota por el tercer puesto en Inglaterra 2015).

Nicolas Sanchez, el apertura de los Pumas. (foto AFP)

Otras ausencias sensibles son las del segunda línea Tomás Lezana por una sinovitis en una rodilla, el centro Jerónimo de la Fuente con una distensión muscular, el tercera línea Leonardo Senatore por un desgarro, el hooker Julián Montoya con un esguince en la rodilla izquierda, el wing Sebastián Cancelliere por un esguince en el tobillo derecho y el ala Juan Manuel Leguizamón, que se realizó una artroscopía en los meniscos.

Además, el segunda línea Tomás Lavanini será suplente porque se entrenó con anteojos protectores debido a su reciente operación de cataratas y a último momento el centro Matías Orlando fue descartado por una sobrecarga muscular.

Con Nicolás Sánchez (contratado por Stade Francais, se despedirá de Los Pumas ante Barbarians) y Gonzalo Bertranou (le ganó la pulseada a Tomás Cubelli) como conductores, Ledesma confirmó en la línea de backs a Bautista Ezcurra y Bautista Delguy, que habían debutado en junio. Como relevos aparecen el hooker Diego Fortuny, el pilar Santiago Medrano y el centro Juan Cruz Mallía, todos sin experiencia en el certamen.

Aquel triunfo histórico de Los Pumas en Durban en 2015. Foto: EFE

En Durban, donde los Pumas obtuvieron hace tres años una histórica y concluyente victoria por 37-25 ante los Springboks, comienza el primer tramo de una agenda cargada de compromisos: seis partidos por el Rugby Championship con las tres potencias del hemisferio Sur, otros tres correspondientes a la ventana de noviembre que incluye visitas a Irlanda, Francia y Escocia, más el cierre en diciembre en Twickenham ante los Barbarians.

¿Podrá Ledesma transmitir esa pasión por jugar, volcar todos sus conocimientos y la empatía necesaria, en este período de reconstrucción, para conseguir el temple y ese salto de calidad exigible que enderece el rumbo en un desafío superlativo y con obligaciones distintas a las que afrontó en el Súper Rugby?