Silvio Berlusconi puede nuevamente ser candidato en las elecciones italianas. El Tribunal de Vigilancia de la magistratura de Milán lo rehabilitó anoche tras haber sido condenado por fraude fiscal en agosto de 2013.

La medida tiene una gran importancia política porque fortalece a il Cavalliere que había sido excluido del Senado y lo pone otra vez en pleno movimiento al frente de su partido en un momento político altamente complicado, en el que Forza Italia había sido marginado de las negociaciones para formar un nuevo gobierno.

Berlusconi fue condenado en la causa por los derechos televisivos de Mediaset, una de las principales empresas de su imperio televisivo que comprende las tres grandes redes comerciales privadas italianas.

El tres veces ex primer ministro no cumplió ni un día en la cárcel pese a recibir una sentencia de cuatro años de reclusión. Tres años le fueron perdonados por una condonación general y el resto de la pena “Berlux” la expió asistiendo ancianos en un instituto católico vecino a Milán, bajo el control de los servicios sociales.

Berlusconi es el segundo socio de la coalición de centroderecha. Sufrió una sonora derrota en las elecciones del 4 de marzo (14%) pero fue excluido de las tratativas por el veto del Movimiento 5 Estrellas (32%) debido a sus condenas judiciales y a los escándalos que sacudieron a su último gobierno.

Por esta razón, los “grillinos” de 5 Estrellas negocian un nuevo gobierno con Matteo Salvini (18% en las elecciones), líder de la alianza de centroderecha que sumó el 37% en los comicios del 4 de marzo.

Si Salvini y Luigi Di Maio, líder “grillino”, no logran formar un gobierno y se va a nuevas elecciones generales, Berlusconi podrá ser nuevamente candidato.

Su partido Forza Italia se abstendrá o votará en contra del Ejecutivo que nazca de las negociaciones entre Di Maio y Salvini, aunque Berlusconi continúa a formar parte de la alianza de centroderecha.

​Roma, corresponsal