Marcio Faria, uno de los máximos jerarcas del imperio Odebrecht que se acogió al régimen de la delación premiada en Brasil, confirmó a los investigadores del Lava Jato que se pagaron coimas multimillonarias en la Argentina por el proyecto para extender las redes troncales de gasoductos.

Faria explicó que Odebrecht pagó esas coimas y que "andaba todo bien", sin que el ministro Julio de Vido o su lugarteniente en el Ministerio de Planificación, Roberto Baratta, se quejaran. Hasta que murió Néstor Kirchner, el 27 de octubre de 2010, y todo cambió. "Lo primero que decidimos hacer es dejar de pagar".

Los cortocircuitos terminaron, rememoró Faría, cuando el lobista Jorge "Corcho" Rodríguez también contactó a Flavio Bento e Faría "para resolver los problemas", se reanudaron las coimas "y el contrato volvió a funcionar".

En diálogo con "Línea Abierta" Gustavo Segré, socio director de Center Group, profesor de la Universidad Paulista y analista internacional sostuvo al respecto que la Justicia “no puede hacer nada porque la forma en que llega esa documentación no es judicial, (...) si yo fuera abogado defensor de alguno de los involucrados en estos videos diría que impugno ese material porque no ha sido obtenido en sede judicial, con lo cual nos puede frustrar más todavía porque podemos saber quién pagó y verlo paseando y gastando nuestro dinero por la calle".

E insistió: "A los nombres los tenemos, son siempre los mismos, pero lo bueno hubiera sido enterarse por un juez que dictamine alguna medida judicial, pero el saber que fulano robó y no poder hacer nada es más frustrante que no saber". 

Lula da Silva

Este lunes 7 de mayo se cumplió un mes de que el expresidente de Brasil, Lula da Silva está alojado en una prisión en Curitiba. Sobre la situación del exmandatario, Segré explicó que "es complicada, esta semana está en la búsqueda del milagro judicial porque hay tres miembros de la Corte Suprema que pueden, eventualmente por un argumento judicial, mandarlo para su casa (prisión domiciliaria) o liberarlo, hasta la tercera instancia y hay que esperar pero la situación sigue siendo complicada, Lula tiene sentencia confirmada por eso está preso en uno de los siete procesos que tiene y los otros dos, diría que a lo largo de este año deben tener sentencia también".

Y reveló que "si sumás la cantidad de años que Lula pueda estar preso, supera los 100, si se suman el promedio de todas las sentencias sobre los crímenes que se los acusa en los siete procesos que tiene".

Además Segré recordó que Lula "no puede ser candidato por una ley que él implementó … estimo que la libertad eventual de Lula o la prisión domiciliaria deberá ser acompañada por un acuerdo para que no sea presidente".

Sobre si existe alguna persona o grupo que el exmandatario haya bendecido como para destrabar la situación en la que se encuentra el PT, el analista internacional señaló que "él puede indicar a alguien que sea el trasferidor de los votos, pero no me parece que eso consiga resolver una cuestión de ganar para un eventual indulto".

"Lula es una cosa como candidato y otra como indicador, sobre todo con el antecedente que indicó a Dilma Rousseff y así le fue a Brasil", finalizó Segré.