En medio de del lanzamiento de la serie biográfica sobre Luis Miguel, autorizada por el propio cantante y emitida por Netflix y luego que el exdirector del Festival de Viña del Mar, Sergio Riesenberg que aseguró que "a Luis Miguel el padre le daba cocaína a los 14 años", Cacho Rubio, periodista e íntimo amigo del cantante en sus comienzos habló con "Línea Abierta" (FM 101.3 de 9 a 13) reveló que Riesenberg "es un loco mentiroso".

"Yo estaba manejando Los Parchis y me traen a Luis Miguel, yo no quería pero me dieron el doble de la plata que yo ganaba y me convencieron. Estaba haciendo ´Sábados de Todos´, lo metí ahí y fue bastante bien y después me fui un año a vivir a la casa de él y a hacer la gira internacional que estaba ", contó Rubio rememorando los comienzos del mexicano.

Sobre la posibilidad de que el padre del Luis Miguel le diera cocaína a su hijo, Cacho contó una anécdota que presenció cuando el cantante tenía 14 años: "Estábamos en un hotel y (Luis Miguel) fue a buscar una cerveza y todos los que estábamos ahí nos quedamos helados porque el padre le dio un cachetazo y le sacó la cerveza, no lo dejaba hacer nada. El padre hacía lo que quería pero, hasta los 18 años lo manejaba el padre, después de los 18 años hizo otra cosa, así que el que dijo eso (que el padre le daba cocaína) no sé por qué lo dijo, dicen tantas cosas, cualquiera dice cualquier cosa".

En otro orden de cosas, el preiodista reveló cómo surgió el tradicional uso de su chalina: "El año que yo me vine (de México) porque extraño a mi familia, me dijo (Luis Miguel) ´bueno, vos sos gardel´ y me regaló la chalina de seda". 

Y retomó: "El padre murió de una sobredosis y le gustaba chupetear (sic) y era medio déspota, cuando íbamos de gira el padre era el que dormía en la suite presidencial".

Para finalizar, Rubio explicó que "cuando Hugo López, que fue representante de él, a los 18 años, le calentó la cabeza, para bien o para mal no sé, Luis Miguel se separó (del padre) y ahí viene la debacle del viejo".