Río de Janeiro - El presidente brasileño, Michel Temer, decretó el 6 de febrero la intervención federal en el área de seguridad de todo el estado fluminense. Esa decisión permitió ceder el control de la seguridad a las Fuerzas Armadas.

El episodio más reciente tuvo lugar en la madrugada de este sábado en la favela Vila Alianca, en la zona oeste de Río de Janeiro, donde una adolescente de 15 años fue alcanzada en la cabeza por un tiro de fusil que supuestamente partió del arma de un narcotraficante, según la versión de la policía.

También en el oeste de la ciudad carioca, un grupo de sospechosos comenzó la noche del viernes a disparar contra un vehículo en el que se encontraba un policía militar y su esposa, de 27 años, según señaló la policía en un comunicado citado por la agencia EFE.

El agente, que disfrutaba de un día libre, reaccionó y como consecuencia del enfrentamiento su esposa recibió un disparo en la cabeza que provocó su muerte poco después en un hospital cercano al lugar de los hechos.

Otra mujer de 45 años falleció al ser alcanzada por una bala perdida en otro punto de la urbe sin que las autoridades hayan facilitado más información al respecto, según EFE.

Por otro lado, en el barrio Engenho da Rainha, en el norte de Río, una joven de 29 años recibió atención médica por heridas de bala, pero está fuera de peligro.