El viernes por la noche, Ariel Alberto Olivera de 23 años de edad, ingresó al Hospital Cullen con una herida de bala en la zona del torax que le causó la muerte. 

Unas horas después, un hombre se hizo presente en la Subcomisaria 10ma y dijo que su hijo, de 18 años, era el responsable del disparo que mató a Olivera. Además los guió al lugar donde este se encontraba.

Inmediatamente, los oficiales se dirigieron a una vivienda ubicada en inmediaciones de las calles Aguado y  Amenábar, donde aprehendieron al joven y le secuestraron una Pistola calibre 22 LR,  marca Bersa, modelo 23, que contenía ocho cartuchos del mismo calibre en su interior.

Por tal motivo los agentes lo trasladaron a la sede policial correspondiente y le dieron conocimiento al fiscal interviniente, haciéndose cargo la PDI .