Las hijas del Diez fueron invitadas para recorrer los Países Bajos junto a Marley para el ciclo Por el mundo. Pero durante su estadía en Ámsterdam, quisieron ir a visitar a la reina Máxima y, cuando se acercaron a su casa, algo salió mal.

El día viernes el conductor había estado hablando con Verónica Lozano y le pidió que lo ayude para poder encontrarse con Máxima. Finalmente, horas más fueron a visitarla. “¡Y llegamos a la casa de Máxima! ¡Qué nervios!”, dijo Marley mientras se acercaba caminando junto a Dalma y Gianinna hacia la morada real.

 

 

 

 

 

“Debe estar re ansiosa que no llegamos”, le respondió Gianinna siguiéndole la broma.

“Tardamos un poquito, nos perdimos en el camino”, contaba Dalma a cámara.

Todo venía bien, hasta que tras intentar aproximarse a la residencia real, atravesando un portal entre los jardines del lugar, fueron increpados por la Policía local que les impidió pasar.

Ellos no habían pedido autorización ni tampoco averiguaron qué permisos necesitaban para ingresar al lugar. Probaron suerte, les podía salir bien o mal. Les salió mal.

“Les contamos que fue de verdad”, contó Marley y Gianinna continuó: “Claro, fuimos por ese pasillo para llegar a la casa pero era un bosque bastante resguardado”. “¡Y apareció la Policía!”, aseveró Marley.

Según contaron, el lugar estaba custodiado y había un cartel que explicaba que los turistas no podían pasar. Pero, ¿si había un cartel por qué no se detuvieron? Marley lo explicó: “Estaba en holandés, no había forma de saber”.

 

 

Pese a que finalmente no lograron ver a Máxima, quien está atravesando un difícil momento a días de la muerte de su padre, Marley pudo recorrer varios “coffe shops” donde comercializan productos a base de cannabis, la llamada Zona Roja y algunos museos junto a las hermanas Maradona. Eso sí, esta vez no probó ningún hongo extraño.

¿Te acordás de este momento delirante?