Unión deseaba cerrar de la mejor manera el año, al menos en el plano deportivo, algo que pudo plasmar en Córdoba con un valioso empate frente a Talleres.

Indudablemente los picos que tuvo el equipo en 16 fechas fueron notorios y la resultante de muchos condimentos. Primeramente la conformación del actual plantel, con muchas partidas sustanciales, imposibilitó a Madelón poder rearmarse sin perder puntos en el camino.

Tal vez el punto más bajo llegó con aquellas cuatro derrotas en fila, pero desde el empate contra Rosario Central y ganando un nuevo Clásico le permitieron retomar la senda de los resultados favorables.

Nuevamente el retroceso llegó desde Independiente incluso hasta su despedida, pues apenas los rojiblancos en las últimas 6 presentaciones.

Los 20 puntos acumulados en un torneo que entrega múltiples clasificaciones a torneos internacionales no dejan de ser buenos, si bien es cierto por allí las expectativas del cuerpo técnico y jugadores era poder estar un poco más arriba.

Unión se fue de vacaciones en la 17ª colocación, a cuatro puntos del último clasificado a la Copa Sudamericana. Pero con un calendario agitado en el semestre inicial de 2020, que representará a afrontar como mínimo doble competencia.

La participación por segundo año en Copa Sudamericana es un gran desafío pues el objetivo primario pasará por pasar la primera ronda, algo que no sucedió en su estreno ante Independiente del Valle (Ecuador).

En las últimas semanas se lo escuchó públicamente a Madelón hablar de una cantidad de 8 jugadores a incorporar. Incluso el estratega deslizó la posibilidad de quedarse un par de días más en la capital provincial para coordinar ciertos temas con el Director Deportivo y la dirigencia.

Pero en el vestuario cordobés ese semblante del conductor cambió al expresar que, más allá de ciertas situaciones, sabe lo que tienen que sumar para potenciar el plantel. En esta dirección dijo textualmente Madelón estar observando a futbolistas con poco rodaje en otros clubes.

El mercado está en veremos, pero la situación económica será un condimento muy especial, no solamente para Unión, sino para el resto de los equipos de la Superliga.

Madelón tiene la idea de incorporar seis jugadores nuevos que lleguen con la firme intención de pelear puestos con jugadores que siguen en el plantel, pero con ese horizonte de ir por más, no solamente a nivel local, sino en el plano internacional.

Con la salida confirmada de Maximiliano Cuadra, el otro punto saliente es saber si se decidirá o no renovar el vínculo con el uruguayo Javier Méndez. Y a pesar de que algunos futbolistas tienen cláusula de salida (Cavallaro, Gómez Andrade), la oferta debería ser apetecible y a cobrar en el acto, para que los dirigentes permitan partidas en este mercado de verano.

De aquí al 3 de enero, momento en que el plantel está citado para volver a los entrenamientos, se resolverán muchos temas de manera tal que Madelón pueda tener casi su plantel versión 2020 listo para irse a Mar del Plata a realizar la pretemporada.