Como todos los jueves, el Dr. José Domínguez, médico psiquiatra, presidente de la Asociación de Psiquiatras de Santa Fe, miembro del capítulo de Trastornos de Ansiedad de APSA, estuvo en los estudios de "Línea Abierta" (FM 101.3) quien, junto a la integrante de su staff, la nutricionista Caren Fruh hablaron sobre nutrición y estados de ánimos.

Al respecto, Fruh explicó que "la alimentación es parte fundamental de la vida, partimos de la base que no se puede vivir sin comer, vamos a hablar de la relación entre la nutrición y los estados de ánimo en esto que se llama eje intestino cerebro".

"Siempre hay una multiplicidad de causas en relación a un síntoma o patología", sostuvo la nutricionista y añadió: "El 70 por ciento de la serotonina, neurotransmisor que regula el humor, el sueño, el apetito, el estado de ánimo, se produce en el intestino gracias a lo que se llama microbiota intestinal, que son las bacterias y es lo que permite la regulación de este eje intestino cerebro que tiene que ver con el estado de ánimo, cómo esté funcionando nuestro intestino tiene mucho que ver en relación a cómo uno se sienta a nivel de estado de ánimo".

En el mismo sentido, Fruh reveló que "generalmente la depresión está muy asociada a lo que son las enfermedades inflamatorias intestinales y siempre hay que tener en cuenta cuando se está haciendo una terapéutica para personas con depresión o con trastornos de la conducta, en donde hay medicación implicada, nunca una medicación puede actuar si el cuerpo no tiene una buena nutrición".

"El cerebro se alimenta del 20 por ciento de la energía del cuerpo, es lo que necesita para funcionar y si este cerebro no está bien nutrido, bien alimentado, tampoco puede cumplir con sus funciones y se empieza a alterar el resto de los órganos, también hay nutrientes fundamentales para que este cerebro trabaje bien como el Omega 3 que es un nutriente fundamental para la función cerebral porque es el que forma todas las membranas de las células del cerebro, un 70 por ciento del cerebro está compuesto por Omega 3, es una grasa que principalmente la encontramos en los pescados de mar, en los frutos secos como las nueces o en las semillas como la chía", sostuvo la licenciada.

Además, Froh expresó que "si nosotros no tenemos un intestino sano es muy difícil la absorción de los alimentos y de los medicamentos, es muy importante pensar primero en la salud intestinal y después hablar de nutrientes fundamentales para el cerebro, como otro nutriente también tenemos el ácido fólico y la vitamina B12, indispensables en relación a la formación de las neuronas y los encontramos en vegetales de hojas verde oscura, al primero y la B12 principalmente las encontramos en alimentos de origen animal, las carnes rojas, el pollo y el huevo".

Y detalló: "Cuando hablamos de actividad cerebral es muy importante también todo lo que es antioxidantes, como la vitamina C (cítricos, frutillas, Kiwi) y E (aceites esenciales, como chía o frutos secos) nuestras células se nutren de oxígeno y que nosotros tengamos un cerebro oxigenado hace que nuestras funciones estén vitales".

Por su parte, el Doctor Domínguez acotó: “Uno no tiene relacionado la nutrición con los distintos estados de ánimo y lo que queremos destacar es la importancia del tratamiento interdisciplinario porque, lo que muchas veces ocurre es que hay pacientes que consultan al nutricionista sin saber que hay un trasfondo de depresión o de un trastorno de ansiedad y al revés”.

Respecto a si existe el comer emocional, la licenciada en nutrición explicó que “Sí, el primer contacto que un ser tiene con la vida es, por un lado, el pecho materno, para recuperar la energía perdida y por el afecto y esto nos condiciona para toda la vida, somos consumidores emocionales y pensamos en comer en relación con lo que nos da placer, siempre que pensamos la comida, la pensamos primero que todo, en relación porque no somos seres aislado, vivimos en comunidad y vamos a pensar en comer y compartir y siempre que pensemos en un alimento, será aquel que nos de placer”.

Para finalizar, la nutricionista sentenció: “Nosotros lo que hacemos es ensamblar el placer con las necesidades fisiopatológicas, pero que el placer siempre esté porque si no, no sirve”