Unión tendrá una dura visita el próximo sábado cuando le toque medirse con Huracán, un elenco que está peleando su ingreso a la Copa Libertadores 2020. Y más allá del cambio de entrenador en el receso, si hay un jugador regular que siempre aporta ese es Lucas Gamba.

El mendocino con pasado en el Tate charló en el programa La Primera (Sol 91.5) y en el inicio reconoció que "lo principal era mantenernos arriba entre los cuatro primeros, estamos quintos con Atlético Tucumán que tiene un partido menos, necesitamos ganar la mayor cantidad de partidos hasta el final para llegar a la Copa Libertadores".

En el plano personal, con cinco goles es el máximo artillero del Globo, aunque prefiere mantener el perfil bajo y acotar que "gracias a Dios me fue bien, marqué un buen número de goles, obviamente me hubiese gustado ganar y ayudar más al equipo, dentro de todo estamos bien, aunque necesitamos sumar porque empieza la doble competencia y se nos ajusta la agenda".

Desde que abandonó casi un año atrás Unión por allí no tuvo la posibilidad de referirse a su salida del club, envuelta en su momento en una gran polémica al no llegar un acuerdo para extender el vínculo. En este sentido disparó que "se sabía que mi idea era irme afuera pero al final no se pudo dar, había un par de ofertas y se complicaron, después Unión quería renovar pero la verdad que los números había mucha diferencia y ellos no se pudieron acercar a lo que pedíamos nosotros, teníamos la intención y se lo planteamos, había mucha diferencia y no estaba en condiciones de regalar nada, me tocó tomar una decisión y por eso me vine a Huracán".

Para más adelante, agregar: "Son cosas del fútbol, se terminaba el contrato y necesitábamos renovar o irnos, no había vueltas, si Unión no nos podía hacer un buen contrato teníamos que buscarlo en otro lado. Gracias a Dios Huracán aceptó un contrato por varios años, tuvimos un reconocimiento importante y me tocó venirme para acá, se lo planteamos a Unión que no estaba en condiciones de pagarme lo que pedía".

Indudablemente la dupla que conformó junto a Soldano fue una de las mejores de la Superliga, a lo que el delantero acotó que "nos sentíamos cómodos jugando juntos, llegamos juntos al club, nos sentíamos muy bien y teníamos una excelente relación y eso se notaba en la cancha, es un jugador muy inteligente, con mirarnos nos dábamos cuenta de lo que teníamos que hacer dentro de la cancha".

La charla volvió a girar sobre su partida de Santa Fe, pero siempre Gamba con sus dichos medidos e intentando poner paños fríos en un tema que fue muy conversado en su momento: "No soy de hablar mucho, no me gusta porque se malinterpretan las cosas, no me interesa quedar mal, por eso prefería quedarme callado y bancarme la que venga y estar tranquilo. Hoy día lo que uno dice a veces la gente lo toma para cualquier lado, me fui del club con buena relación, se que recibí críticas por venirme acá, la ieda era irnos afuera pero al no realizarse teníamos que tomar una decisión y nos tocó venirnos a Huracán".

Esa negociación que se extendió durante varios días en el receso de una temporada a otra tuvo varios capítulos con distintos matices. En este sentido Gamba dijo que "siempre estuvimos tranquilos con mi representante, fuimos sinceros pero la verdad que él recibió más críticas que yo y la pasó mal, lo mataron. Muchísima gente nos bancó y no me puedo quejar, tengo un cariño enorme con la gente de Santa Fe, no manejo la economía del club, se portaron de diez conmigo y se que hicieron un esfuerzo grande. Teníamos un número que no nos podíamos achicar y el club no podía pagar".

En la parte final opinó que "Unión tiene un plantel bárbaro, Leo (Madelón) lo sabe mucho y siempre lleva jugadores muy buenos. Es muy exigente, le gusta hace todo casi a la perfección, le costó tener una regularidad pero tienen jugadores de muy buen pie y lo demostraron la fecha anterior ante Tucumán".