La Justicia Federal llevó a cabo tres allanamientos a fin de dar con el paradero del pequeño Maximiliano Sosa, desaparecido el 21 de diciembre de 2015 de su casa, ubicada en el barrio Juan Pablo II de la ciudad de Ceres. 

La policía científica llevó adelante los procedimientos en tres lugares específicos: la casa de Patricia Sayago, la abuela del niño (detenida desde agosto de 2016). El domicilio de un vecino al que el pequeño frecuentaba. Y un campo que estaba señalado en la investigación.

Sin embargo, ninguno de los procedimientos arrojó datos que permitan saber qué sucedió con Maxi.

En diálogo con "Línea Abierta" (FM 101.3) Claudia Iturre, locutora y directora de FM Alternativa 91.5 de Ceres explicó que la semana pasada "llegaron a la casa de la abuela muy temprano por la mañana e hicieron escavaciones en el lugar y en horas de la tarde volvieron a domicilios aledaños, precisamente al de Bruno, el amiguito con el que jugaba aquel día.

 

Una vidente

Sobre la órden de allanamientos, la periodista comentó que la misma madre del nene confirmó que fue a pedido de ella "hablamos con ella porque una mujer de Mendoza que dice ser vidente le insistía que pida excavaciones porque su hijo estaba encerrado ahí". Consultada sobre si después de eso la mujer se comunicó con la vidente aseguró que hubo contacto y le dijo que sigan buscando

Dos detenidos

La periodista recordó que "por el caso, sigue detenida la abuela y la pareja de la abuela" además agregó que desde el nucleo nadie la visita en la cárcel porque no entienden como la abuela pudo hacer eso. Cerró.