El personal de bomberos de Villa Gesell, Pinamar y también del Partido de la Costa trabajaron en la zona y lograron atacar el fuego con el apoyo de camiones hidrantes.

Anoche, a partir del amplio despliegue que se dispuso por tierra y por aire, se pudo controlar el avance y por lo menos se dio por asegurado que no había riesgo para habitantes de la zona. Ante el riesgo que se vislumbraba por las llamas, también se dispuso la evacuación de un camping que está en las inmediaciones.

Desde el Cuerpo de Bomberos de Villa Gesell informaron a LA NACION que se volcaron "todos los esfuerzos" a controlar el incendio. Se espera que hoy, si disminuye el viento, solo quede por delante enfriar esa superficie de casi 160 hectáreas cercanas a la costa, entre Villa Gesell y Cariló.

Los vecinos de la zona y en particular la gente que disfrutaba de la playa se sorprendieron por la columna de humo que se volvió muy espesa con el correr de los minutos. También, se pudieron divisar las lenguas de fuego entre ese frondoso bosque donde predominan acacias y pinos.

Se trata de un sector de amplia forestación próximo a la costa. El fuego amenazó ayer con expandirse a viviendas del Barrio Norte de esta ciudad, las primeras a poco más de 100 metros de uno de los extremos de la línea de llamas.

El sector alcanzado por el incendio está próximo al circuito donde cada año se disputa la competencia Le Touquet, para vehículos de enduro. Los árboles allí existentes tienen una altura apenas superior a los dos metros pero el entorno, donde predominan dunas de arena y gran cantidad de vegetación, dificultan el acercamiento de las autobombas.

Por eso la pronta intervención de los aviones hidrantes permitió avanzar en el control de las llamas. Las tareas continuarán hoy, momento para el que se esperan condiciones climáticas más favorables para terminar de apagar un incendio que preocupó a muchos en esta parte de la costa.

Con información de Darío Palavecino