“Entendemos que el acceso a la energía eléctrica es un derecho humano que debe ser garantizado por los Gobiernos, ya que la misma se trata de un bien social que hace a la calidad de vida, a la vivienda digna, y al desarrollo humano”, señaló en primer lugar Kerz.

 

“El Impuesto al Valor Agregado es un impuesto de carácter regresivo, en tanto el mismo se traslada a los costos que debe abonar el consumidor final, en este caso, de las prestaciones del servicio de energía eléctrica, gravando con la misma intensidad a todos los usuarios sin distinción de las particularidades económicas de cada uno”, agregó.

 

El proyecto aprobado, se presenta como una nueva alternativa para abaratar los costos de las tarifas del servicio público de energía eléctrica, en el marco de “un incremento y una quita de subsidios que ha disparado el precio de manera brusca, produciendo un grave desequilibrio en las finanzas de los hogares, como así también de las industrias y comercios”, sostiene el escrito.

 

“Entendemos que el esfuerzo no sólo debe ser de los gobiernos locales, y en especial del Estado Municipal de la Ciudad de Santa Fe, al que constantemente procuramos robustecer financieramente para afrontar los nuevos desafíos que se deben asumir y que exceden las clásicas atribuciones municipales”.

 

En este sentido, el Concejal sostuvo que “el regresivo impuesto al valor agregado que se tributa al Gobierno Federal resulta, por el porcentaje de su alícuota, uno de los más importantes tributos que incrementan el costo. Y es por ello mismo que su eliminación redundará en una energía más barata y, por consiguiente, más accesible a todos los santafesinos.

 

Cálculo del IVA

 

El impacto del Impuesto al Valor Agregado (I.V.A.) es contundente. De todos modos, debemos aclarar que el porcentaje de incidencia puede variar analizando distintos consumidores.

 

El I.V.A., se calcula sobre el “Básico” de la factura y sobre la “Cuota de Alumbrado Público (C.A.P.)”. El Básico está compuesto, a su vez, por los consumos de Kwh y por la Cuota de Servicio. Ambos conceptos pueden variar dependiendo la clasificación que asuma el cliente. Además, el C.A.P. también varía según el rango de consumo en el que se ubique cada cliente.

 

De todas maneras, a modo de dimensionar el impacto, es necesario mencionar que el porcentaje de incidencia en los distintos casos oscila entre el 17% y el 21% respecto del total que se abona en una factura.

 

“Hay una situación crítica por la que atraviesan miles y miles de familias santafesinas debido a la inflación, el congelamiento de las paritarias (o el retroceso del poder adquisitivo de los trabajadores respecto de las metas inflacionarias), sumado a la desocupación cada vez más preocupante, los despidos, entre otros”, finalizó.

 

FUENTE: Prensa Concejo Municipal