River es la próxima estación a conquistar por Central. El empate contra San Pablo quedó ahí, cajoneado hasta el mes próximo, que será cuando deberá visitarlo para definir si sigue en la Copa Sudamericana. Es tiempo de volver a la realidad. La Superliga es el presente canalla. Y ahí está el representativo de Arroyito. Atrincherado y esperando la señal para salir esta tarde a copar el estadio Monumental. Ese mismo campo que tan adverso le viene siendo a lo largo de los años. Sin embargo, Leonardo Fernández confía en el renovado pelotón que pondrá en el frente de batalla en pos de dar el batacazo en el corazón de Núñez.

   El tablero de la previa indica que Central tiene todo bajo control. Se rearmó con lo que tiene a mano y se parará en el estadio millonario con casi medio equipo modificado por diferentes circunstancias (ver aparte). Pero la matriz no se alteró un milímetro. Presionar e intentar ser protagonista es el quid de la cuestión auriazul.

   Claro que River no será un hueso fácil de roer. Porque también lo persiguen las necesidades a corto plazo. Además buscará hilvanar la quinta victoria seguida en el plano local, pese a que presentará una formación con varias modificaciones.

   Marcelo Gallardo pondrá hoy un mix debido a que el próximo jueves visitará a Emelec en Ecuador por la Copa Libertadores (ver aparte). No obstante, el Muñeco buscará ofrendarle a su masa un triunfo para continuar alimentando la ilusión de aferrarse a una plaza copera en la próxima temporada luego de un arranque bastante torcido.

   Para el canalla también será clave este duelo. Porque tiene que dar otra imagen jugando fuera de los límites de Arroyito, debido al reciente antecedente en suelo paranaense, donde brindó una de las más pobres imágenes de lo que va de la temporada.

   Por tal motivo, Leo Fernández ajustó las clavijas para esta especial cita. Su equipo debe comprender que no puede darse otro lujo de resignar más puntos, porque cada vez queda menos hilo en el carretel de las posibilidades para sacar pasaporte internacional.

   El encuentro pinta para ser abierto, más allá de que hay cierta ventaja lógica para el anfitrión en el análisis virtual previo. A eso hay que sumarle que chocarán dos estilos opuestos. Al millonario además lo envuelve una dirigencia sólida y triunfadora. Que ganó todo lo que tuvo frente a sus narices desde que dejaron el ascenso.

   Sin embargo, Central tiene orgullo y amor propio. Por ende, hará lo que pueda con las herramientas que tiene a mano para salir bien parado de esta compleja y expectante velada, la que se vivirá esta tarde en el Monumental de Núñez.