No está bien. Sin embargo, el cuerpo técnico observará cómo aparece Washington Camacho en la práctica de hoy para evaluar y luego determinar si formará parte de la selecta comitiva que reiniciará la temporada oficial viajando mañana a la tarde rumbo a Buenos Aires, ya que pasado mañana a la noche visitará a Independiente. Más allá del análisis que realice Leo Fernández junto a sus colaboradores en el entrenamiento matinal, la lógica marca que el volante uruguayo tiene todas las fichas para seguir el encuentro contra el Diablo desde la televisión.

Camacho ayer volvió a hacer trabajos con pelota. Acusó dolor en el hombro derecho por el esguince acromioclavicular que sufrió el pasado domingo en el amistoso ante Lanús en cancha de Colón. Jugó pero condicionado, esa es la realidad.

A raíz de eso, el cuerpo médico decidió infiltrar sin dudar al volante uruguayo. La idea es bajar la intensidad del dolor fundamentalmente. Aunque eso no representa que pueda estar ante el Diablo en el estadio Libertadores de América porque aún tiene la zona muy sensible. Está condicionado para correr y jugar, por más que sea uno más a la hora de entrenar con pelota.

Pero sus compañeros no lo pechan con la misma fuerza que harían si el rival fuese otro. Nadie quiere ni desea que se lastime más. De hecho, ayer pasó eso cuando actuó para los suplentes. Por eso hoy será una jornada determinante para el jugador charrúa.

El entrenador verá cómo está y además charlará con el mediocampista para escuchar su opinión. Aunque todo marca que tiene un porcentaje altísimo de probabilidades de quedar afuera de la lista de los concentrados que saldrán tras la práctica. Porque la idea es que llegue en buenas condiciones al encuentro del próximo lunes 29 contra en La Plata.