Una maestra rural denunció a un productor en la provincia de Entre Ríos por realizar una fumigación a metros de la escuela en la que trabaja y de viviendas de la zona.

 

Imagen ilustrativa.

 

La docente que realizó la presentación policial se llama Sandra Aguirre y se desempeña en la escuela Nº 58 Bartolito Mitre, ubicada en la localidad de Espinillo Norte, departamento de Paraná. 

"Alrededor de las 8.20, la ordenanza que estaba en la escuela me avisó que estaban fumigando enfrente de la escuela, cruzando la calle. Ella filmó, mandó el video e hicimos la denuncia en la comisaría de La Picada", relató Aguirre y en una frase, marcó su compromiso: "Yo trabajo en la escuela y no puedo mirar para otro lado".

Fuentes policiales y judiciales informaron que la maestra detalló que durante la aplicación de los fitosanitarios "no había un profesional habilitado supervisando la tarea y tampoco se habría cumplido la legislación vigente en cuanto al aviso previo". La acción alcanzó a la escuela y a viviendas familiares. 

 

La denuncia que radicó la maestra. (Fuente: www.aimdigital.com.ar)

 

"Lo de las fumigaciones pasó siempre pero nunca nadie actuó. Hay una vecina de la zona que en otro momento hizo denuncias porque tuvo problemas de salud", explicó Aguirre, quien trabaja en la escuela pero no reside en la zona.

En otro hecho similar, que fue denunciado por una familia del departamento Tala, la Justicia sancionó a la empresa y a un fumigador oriundo de Villaguay por daños a la salud. En ese caso, se obligó al productor a adoptar una serie de medidas de seguridad que están reglamentadas para proteger a los vecinos como las siguientes: la prohibición de no utilizar productos en cantidades superiores a las recomendadas, de no fumigar cuando el viento existente supere la velocidad indicada de 12/15 kilómetros por hora, dar aviso previo fehaciente a los vecinos con la antelación requerida de 48 horas; fumigar únicamente bajo la presencia de un ingeniero agrónomo, entre otras.