"Corea del Norte lanzó un misil balístico en el Mar Oriente desde una base en las cercanía de Sinpo, en la provincia sureña de Hamgyong, el miércoles alrededor de las 6.42 am" (18.42 del martes hora argentina), denunció el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas surcoreanas, citado por la agencia de noticias de ese país Yonhap. 

Según Seúl, el misil realizó una trayectoria de unos 60 kilómetros, antes de caer en el agua, y fue lanzado desde una instalación en la tierra, no el mar. 

Poco después, el Comando militar del Pacífico de Estados Unidos confirmó el lanzamiento e informó que se trató de un misil balístico de mediano alcance KN-15.

"El Comando del Pacífico de Estados Unidos detectó y rastreó lo que interpretamos como el lanzamiento de un misil norcoreano", informó el vocero Dave Benham, en un comunicado, difundido por Yonhap. 

Las Fuerzas Armadas estadounidenses también confirmaron que el lanzamiento se realizó desde una base terrestre cerca de Sinpo. 

Este lanzamiento, que aún no fue confirmado por Pyongyang, no sólo provocará una nueva reacción del Consejo de Seguridad de la ONU, en donde sus antiguos aliados -China y Rusia- ya comenzaron a sumarse a las condenas impulsadas por Seúl, Japón y sus socios occidentales; sino que imprimirá una tensión extra a la primera reunión cara a cara de Trump y su colega chino, Xi Jinping, en Washington esta semana. 

Desde que asumió el poder Trump, ha reclamado públicamente a China que presione más a Pyongyang y hasta acusó a Beijing de apañar al régimen comunista de Corea del Norte, que se niega a acatar las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU que le reclama el fin de todo desarrollo militar vinculado a su programa nuclear.