Se hizo esperar. Muchos fueron los intentos fallidos a lo largo de los años pero la lucha dio sus frutos con otra clara demostración que cuando las ganas son muchas y todos los caballos tiran para el mismo lado, el resultado es óptimo.

Este viernes, más de 10.000 santafesinos, de acuerdo a los informado por los organizadores, pudieron disfrutar de la primera de las tres noches con lo mejor de la cumbia santafesina que se lleva a cabo hasta el domingo en el Hipódromo de Las Flores.

Todo comenzó con la caída del sol pasada las 19 cuando Habana Combo marcó el camino y mostró por dónde iba a venir la cosa. Un escenario de lujo que nada tiene que envidiarle a otro tipo de eventos recibió a los muchachos que, vestidos de ocasión y con una clara alegría en sus rostros, pusieron ritmo en la antesala de lo que iba a ser la actuación de Los del Málaga. Para los que conocen el género saben que las dos agrupaciones nombradas son estandartes en lo suyo y de esta manera el evento dejaba en claro que desde la organización no se andaban con chiquitas y que el line up de bandas iba a ser acorde a lo que una verdadera fiesta nacional necesita.

Con el atardecer, las luces comenzaban a iluminar un Hipódromo que fue criticado y hasta vapuleado pero que al analizarlo de manera exhaustiva cumple con todos los requisitos técnicos y de seguridad para albergar un evento de estas características. A lo largo de semanas se cuestionó el paso del recital, que en principio se propuso para el Parque Federal, a este espacio del oeste de la ciudad.

A la distancia y ya dilatados los tiempos de discusión es importante aclarar que el lugar está en perfectas condiciones y con un buen vallado de seguridad e iluminación adicional en la entrada al predio, se puede decir que fue acertado el traslado por parte de los organizadores.

Ya de noche con el público llegando a la zona del verde césped, Los Llamadores y La Contra mostraron un sonido un poco más joven del género junto a Juanjo y posteriormente Los Bam Band, que hicieron despertar el grito de los presentes.

Con esto visto sobre el escenario como prólogo del plato fuerte, es increíble pensar que este evento no se haya hecho antes. Lejos de cobijar solo a los amantes del género, la fiesta muestra un lugar familiar donde la música, el aire libre y los clásicos lisos santafesinos son el marco ideal para tres noches inmejorables en noviembre.

El fantasma de Leo Mattioli comenzó a rondar por el predio cuando Trinidad subió al escenario y los hits empezaron a aparecer uno tras otro para el coro de un público respetuoso que se mostraba sediento de temas. Amor, infidelidades, pasión y nostalgia se entrelazaban en canciones anticipando lo que iba a ser un gran momento de la noche con el recuerdo vivo del León Santafesino.

Nico Mattioli (hijo de Leo) ofreció a los cumbieros un homenaje a su padre poniéndose al hombro una extensa carrera y con lágrimas en los ojos recordó a ese viejo que vio cantar en el patio de su casa de Santo Tomé desde que tiene memoria y que le enseñó a tocar la guitarra. Hoy en día un legado de canciones hacen que Nico pueda girar por el país y seguir el mismo camino dentro de la música que le enseñó su padre.

Con algunos invitados, el joven se emocionó en cada canción y con su acordeón hizo mover a todo el público que ya llenaba la zona de campo abajo del escenario. El plato fuerte de la noche fue con Sergio Torres. De carrera indiscutida el ex-Cali trajo un set demoledor que dejó en claro el buen momento del artista. ¿Quién no recuerda Chica Sexy o la Chica de Rojo? Un cierre a pleno que a la vez ofició de carta de presentación excelente para las noches que quedan.

Al final se hizo. Arrancó y por lo que pudimos ver llegó para quedarse. Era fundamental para la cultura santafesina que esta ciudad tenga su propia Fiesta Nacional. Está en pañales y recién arranca pero marca un precedente que llena de responsabilidades a las autoridades de ahora en adelante. Santa Fe puede ser la ciudad de los grandes eventos. Por ese camino es el que se quiere transitar. Este fin de semana seguramente se habrá dado un gran paso.