Con motivo de cumplirse 40 años del último Golpe Militar, el Gobierno de la Ciudad propone esta semana una programación que incluye una exposición, un ciclo de cine y una intervención con proyecciones visuales y música, con entrada libre y gratuita. Esta propuesta se suma a otras actividades que llevan a cabo diferentes organizaciones con el fin de mantener vivo el reclamo de Memoria, Verdad y Justicia.

En el Museo de la Ciudad (Balcarce 1635) y la Estación Belgrano (Bv. Gálvez 1150) se puede recorrer la exposición que reúne obras de la serie “Proceso al proceso”, del maestro César López Claro. El público podrá acceder a esta muestra el jueves, viernes y sábado, de 18 a 21, en la planta alta de la Estación Belgrano; martes y miércoles de 9 a 12 y de 16 a 19, y del jueves al domingo de 19 a 23, en el Museo de la Ciudad. Estas producciones corresponden al período que el propio artista denominó “Nueva Realidad”, en el que además de la crítica a las atrocidades de la dictadura, se abocó a otros temas de denuncia social pertenecen. Las obras pertenecen al patrimonio del Museo César López Claro, dependiente de la Secretaría de Cultura del Gobierno de la Ciudad.

Por otra parte, el ciclo “Cine por la Memoria” contará con proyecciones este jueves, viernes y sábado a partir de las 20, en el Mercado Progreso (Balcarce 1635). La actividad es organizada por la Municipalidad junto a Cine Club Santa Fe. Además, el jueves se realizará la intervención artística “40 años del Golpe”, con visuales y música en el patio del Mercado, a partir de fragmentos de canciones de compositores e intérpretes argentinos, que en diferentes géneros musicales abordaron la temática. Esta propuesta se presentó también el domingo pasado, abriendo la Semana de la Memoria, con la presentación de los músicos Luisina Vanoni, Juan Lorenzo Osorio, Pedro Brumnich y Juan Candioti. 

Kamchatka y Garage Olimpo

“Cine por la memoria” comenzó el domingo 20 con la proyección de cortometrajes, y continuará con películas del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales. El jueves se podrá ver “Kamchatka” (2002), dirigida por Marcelo Piñeyro, con las actuaciones de Ricardo Darín, Cecilia Roth, Héctor Alterio y Tomás Fonzi, entre otros. En el film, los difíciles años de la dictadura son contemplados por Harry, un niño de diez años que lo único que desea es jugar y hacer travesuras con su hermano pequeño. Pero en 1976, cuando su familia perseguida por la dictadura, se ve obligada a esconderse en el campo, comienza para él una nueva vida que pondrá fin a su infancia.

El viernes, el ciclo propone “Garage Olimpo” (1999), del director Marco Bechis con un elenco integrado por Antonella Costa, Carlos Echevarría y Enrique Piñeyro. La película cuenta la historia de María, que durante la Dictadura militar vive en Buenos Aires con su madre en una gran casa en decadencia. Han alquilado algunas habitaciones, y en una de ellas vive Félix, un joven tímido, enamorado de María, que al parecer trabaja de vigilante en un garaje. María enseña a leer y a escribir en un barrio pobre y además pertenece a una organización que lucha contra la dictadura militar. Una mañana, unos soldados la detienen y la llevan al Garage Olimpo, uno de los lugares donde se tortura a los activistas ante la indiferencia o ignorancia general. El encargado del centro elige a uno de sus mejores hombres para hacer el interrogatorio.

Los rubios

El sábado se proyectará “Los rubios” (2003) de Albertina Carri, con las actuaciones de Analía Couceyro, Albertina Carri y Marcelo Zanelli, entre otros. En esta realización, la directora utiliza la cámara para revelar los hechos basados en la vida emocional de sus padres, desaparecidos y asesinados como víctimas de la dictadura. Atacando los engaños de la memoria, consigue testimonios de antiguos compañeros, viejas fotografías, una actriz que encarna el rol de la directora, simpáticos muñecos playmobil y sus propias fantasías. De esta manera, su equipo y ella se embarcan en una búsqueda a través de la geografía e historia de Buenos Aires, tratando de conseguir un profundo entendimiento acerca de lo acontecido. A medida que se develan datos de los padres de la directora, desde los más idealizados hasta aquellos más mundanos, emergen coloridas perspectivas que también se rodean de ciertos conflictos. ¿Quiénes fueron los Carri, cómo desaparecieron? ¿Rubios, morochos, altos, padres, revolucionarios, hijos, activistas, héroes o una ficción del que recuerda? Impregnado por el mito de los desaparecidos, el retrato de esta familia pasa por el prisma de cada persona que evoca, de cada imagen del pasado, de cada foto descolorida por el tiempo o la memoria.