Según explicó el subsecretario de Investigación Criminal y Policías Especiales, Dr. Rolando Galfrascoli, un automóvil venía circulando por la RN Nº11, cuando a la altura de Basail no acató la voz de alto de Gendarmería Nacional, que se encontraba apostada en el lugar. “Ellos dieron aviso a la Policía de Santa Fe, quienes realizaron operativos de cerrojo, de saturación y de control en las rutas”, indicó el funcionario provincial y agregó: “No obstante, este vehículo que venía en fuga logra llegar a Reconquista, pero allí la posibilidad de escape estaba cerrada”. 

En ese contexto, el jefe de la Policía de Seguridad Vial del norte, comisario inspector Gustavo Fernández, recibe un aviso de un cinemómetro localizado en inmediaciones de Las Garzas, “por lo que con su vehículo particular va hacia el lugar que calculaba –por velocidad y caminos a tomar- que podían encontrarse estas personas prófugas”, relató Galfrascoli. 

Efectivamente, “en el centro de Reconquista, Fernández divisa el vehículo en calle Lobato e Hipólito Irigoyen y se pone a 200 metros de distancia”, añadió el subsecretario del ministerio de Seguridad. El seguimiento, que se realizó a cierta distancia, continuó hasta una estación de servicio donde los prófugos volvieron a escapar ante la voz de alto, chocaron algunos vehículos, abandonando el rodado en inmediaciones del club platense El Porvenir. 

Los dos ocupantes del automóvil se dieron a la fuga corriendo, pero uno de ellos pudo ser detenido por la Policía de Santa Fe que se encontraba abocada al hecho. Se trata de un joven de 29 años, quien en su poder se le encontraron documentos y credenciales de la policía de Chaco. Mientras que por estas horas se continúa con la búsqueda del otro prófugo. 

Galfrascoli indicó que “el vehículo –que fue secuestrado- estaba saturado de material estupefaciente, por eso se supone que lo arrojaron del aire y cargaron los panes allí, ya que estaban algunos rotos y guardados sin mucho orden”. 

Interviene la justicia federal de Reconquista.