En este sentido, se develó que los evadidos del penal habrían realizado un tur por la zona céntrica santafesina previo a partir hacia la zona de la ruta provincial Nº 1 donde luego fueron capturados. Hasta el momento, se confirmó que luego de haber tomado de rehén y robarle la camioneta a Juan Ignacio Reynoso en la zona rural de San Carlos, fueron hasta su departamento, ubicado en calle San Jerónimo al 3000 y así pasar la noche del día jueves –jornada donde se conoció que se encontraban en tierras santafesinas.

 

Luego, se sospecha que uno –o dos– de los prófugos salió del departamento de calle San Jerónimo para dirigirse hacia una librería y así realizar la compra de siete metros de cinta vinilo, con la cual habrían ploteado la camioneta Amarok color blanca perteneciente al ingeniero de la empresa Bayer. Con ello se buscó aparentar ser de la Gendarmería. Cabe señalar que se sospecha que en la primera librería no tenían la cinta que pedían los prófugos, situación por la cual debieron recurrir hacia otro comercio que se encuentra a unos 50 metros por la peatonal norte, para poder efectuar la compra. 

 

 

 

 

 

 

Posteriormente, el raid continuó en una farmacia donde se habrían comprado los medicamentos que Martín Lanatta toma periódicamente para controlar la presión arterial. Dicho medicamento es conocido como “Enalapril”. En tanto, existen dudas sobre si se compró una buena cantidad de gasa. En cuanto a las compras en supermercados, la Fiscalía del Ministerio Público de la Acusación, pidió el registro fílmico a los propietarios para investigar si existe alguna evidencia de que los prófugos hayan realizado alguna compra. No obstante ello, también se encuentra en poder del órgano judicial y también de la PDI, el registro de las cámaras urbanas instaladas en calle Crespo y su intersección con San Martín. 

 

Se estima que los tres evadidos del penal de General Alvear salieron de la ciudad de Santa Fe en horas de la noche o a media tarde, ya que fue a las 23.20 cuando pasaron un control vehicular a la altura de Santa Rosa de Calchines. Fue ahí cuando el personal policial comenzó la persecución en la zona rural de Campo del Medio, donde los prófugos volcaron la camioneta Amarok color blanca. Cabe destacar que el seguimiento de parte del personal policial que se encontraba apostado en la ruta provincial Nº 1 partió luego de divisar que el automóvil robado no era perteneciente a la Gendarmería ya que el ploteo no era convincente y además tenía un dato clave: vidrios polarizados, algo que no es usual en las camionetas de la Gendarmería.