Con mucho hermetismo se mueve el presidente Luis Spahn y su grupo de colaboradores, teniendo en cuenta que las operaciones a concretar serían con jugadores de renombre para Primera, tal cual anunció hace poco más de un mes el propio titular rojiblanco.

Se supone también que esos jugadores por los cuales lucha Unión para incorporarlos también son pretendidos por otros equipos, con lo cual la tarea no es sencilla.

De todos modos, la promesa es cerrar las negociaciones en estas horas para que el lunes o, al menos en el transcurso de la semana entrante, se unan al plantel de Leonardo Madelón, que comenzará su pretemporada pensando en el certamen de Transición que deberá afrontar el primer semestre del año.

Mauro Óbolo es el nombre que se filtró. Del cual no se desmintió ni ratificó. Algunos sostienen que es verdaderamente un nombre rutilante en la línea de ataque y que por las redes sociales el club daría a conocer a la brevedad.

Se reflotó lo de Canuto

La novela de la llegada del defensor a Unión sumó un nuevo capítulo en el cierre de 2015, que promete extenderse en el amanecer de un nuevo año.

Siempre la traba para que Ignacio Canuto regrese al Tate era económica. Esos 500.000 pesos mensuales entre préstamo y sueldo eran elevados para lo que puede erogar la entidad santafesina.

Aún así, las posibilidades de recortar la brecha se pueden achicar, de manera tal que la operación le favorezca a las partes y el jugador sea el más beneficiado con la posibilidad de regresar a Santa Fe.

Hay que recordar que Canuto no tiene actividad oficial desde el primer semestre del año pasado, que se quedó en México a respetar su contrato, pero solamente entrenó, porque no estuvo en los planes de León. En caso de concretar su vuelta, ante la partida de Leonardo Sánchez y la casi segura renovación de García Guerreño, tendría muchas posibilidades de tener protagonismo.